III Congreso de Residentes, JMF, Tutores y Unidades Docentes de la semFYC
6-7 de junio de 2025
Enfoque individual
Mujer 57 años. Fumadora (IPA 35 paq/año), con antecedentes de déficit IgA, eritema nodoso recurrente, esofagitis y dudosa enfermedad de Crohn (no confirmada).
Comienza con clínica respiratoria compatible con bronquitis aguda con disnea mMRC 2/4 que no mejora a pesar de tres ciclos de antibiótico (amoxicilina, levofloxacino y azitromicina), añadiendo corticoide vía oral y broncodilatador, sin cambios.
Además, presenta lesiones nodulares en la pierna derecha, de las que se realiza biopsia punch.
La bioquímica y la hematimetría de sangre son normales, salvo VSG 29. Radiografía de tórax muestra tractos cicatriciales en lóbulos superiores. La espirometría objetiva FVC 73%, FEV1 80%, FEV1/FVC 85,8%.
La biopsia de piel revela paniculitis septal con vasculitis de tipo panarteritis nodosa en vasos de mediano calibre.
Debido a la persistencia tras un mes de la clínica, se realiza interconsulta con Neumología, recomiendan TC torácico, que muestra aneurisma de la aorta ascendente (45-47 mm), vidrio deslustrado nodular y patrón en mosaico en lóbulos inferiores.
Enfoque familiar y comunitario
Vive sola, trabaja como autónoma. Sin hijos.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Aneurisma aórtico, vasculitis tipo panarteritis nodosa, disnea con bronquiectasias cicatriciales.
Tratamiento y planes de actuación
Con los resultados de la biopsia de piel y del TC torácico (síncronos), indicamos a la paciente acudir a servicio de Urgencias del hospital de referencia, prealertando a Reumatología.
Evolución
La paciente ingresa a cargo de Reumatología para estudio de vasculitis tipo PAN. Se confirma vasculitis en grandes vasos (aortitis) en el PET-TC y microaneurismas en la arteriografía abdominal. Se inicia tratamiento con corticoterapia vo, ciclofosfamida ev y luego azatioprina vo. Se realiza profilaxis antibiótica y osteoporótica.
La Medicina de Familia es clave en el diagnóstico y tratamiento de pacientes con síntomas inespecíficos. La capacidad del médico de familia para identificar signos de alarma en problemas que podrían confundirse con afecciones comunes es imprescindible para poder iniciar un plan de actuación y conseguir un diagnóstico de presunción. En enfermedades crónicas, como en este caso la vasculitis, el seguimiento continuo por el Equipo de Atención Primaria es esencial para controlar efectos secundarios de los tratamientos y gestionar comorbilidades, mejorando la calidad de vida y el pronóstico del paciente a largo plazo.