III Jornada semFYC de Medicina Rural - Cuenca
20 de octubre de 2018
Motivo de consulta: paciente de 70 años acude por pérdida de peso.
Antecedentes personales: HTA desde hace 28 años con losartán 50 mg vo QD, clortalidona 25 mg vo QD, amlodipino 5 mg vo QD, diabetes mellitus desde hace 3 años en tratamiento con metformina 850 mg vo BID, colecistectomía hace 5 meses.
Antecedentes familiares: madre con HTA, fallece con enfermedad hepática no especificada.
Anamnesis: refiere que desde hace 5 meses tras la colecistectomía ha perdido peso sin causa aparente “la ropa ya no le queda”; incluso sus familiares lo han notado. Se acompaña de hiporexia, astenia, niega otra sintomatología.
Exploración física: peso 42 kg, IMC 18,6 kg/m2. Piel y faneras palidez generalizada. ACP normal. Abdomen suave, depresible, no doloroso a la palpación superficial ni profunda, no se palpan visceromegalias, ruidos hidroaéreos presentes. Escalas geriátricas depresión: 6 puntos moderada, Nutrición: 7 puntos desnutrición
Pruebas complementarias: Hb: 13,4 g/dl Hcto: 42% leucocitos: 9.200 Neutrófilos 78% linfocitos 16% plaquetas 293.000 Glucosa postprandial: 239 mg/dl HbA1c: 9% TSH: 2,05 UI/ml sangre oculta en heces: negativo urea: 58 mg/dl creatinina: 1,1 mg/dl (MDRD 52,19 ml/min/1.73 m2). Elemental y microscópico de orina. Glucosa 300 mg/dl, no bacterias, piocitos, no proteínas. Rx de tórax: no infiltrados, no derrames, no consolidados.
Adulta mayor con malnutrición, con pérdida de peso asociada a cambios fisiológicos del envejecimiento, secundaria a malignidad, de causas psicológicas. Lista de problemas: Pérdida de peso, desnutrición, depresión, diabetes, HTA.
Adulta mayor con pérdida de peso secundario a malignidad.
Diagnóstico carcinoma hepatocelular.
Comunicar las malas noticias, acompañamiento, el buen morir.
Se planteó este caso debido a la importancia de realizar un abordaje integral en torno a la pérdida de peso en el adulto mayor con múltiples patologías, ya que en muchas ocasiones se le resta importancia y se le asocia a un proceso propio del envejecimiento, el control efectivo de los síntomas en la atención al final de la vida puede permitir a los pacientes progresar a través del proceso de muerte de una manera segura, digna y cómoda.