XLIV Congreso de la semFYC - Barcelona
14-16 de noviembre de 2024
Conseguir que los y las estudiantes de medicina acaben de adquirir competencias.
Reducir el miedo de los y las estudiantes a enfrentarse al ECOE.
Implicar los y las residentes de nuestro centro de salud en la docencia y formación continua.
Nuestro CS cuenta con unos 6 estudiantes cada año que vienen a realizar un rotatorio de Atención Primaria durante un mes y medio.
Para ello, aprovechando que tenemos una residente de 4º año pasando su consulta, 2 tutoras docentes y 3 residentes que vienen de forma puntual al CS para realizar tutorías, cerramos las correspondientes agendas de dichas profesionales 1 hora semanalmente y realizamos un Examen Clínico Objetivo Estructurado a la estudiante que esté rotando en ese momento. Durante las 6 semanas de rotación, se realizan diversos casos clínicos, como por ejemplo: del síntoma al diagnóstico: disnea; diagnóstico diferencial del dolor abdominal; la urgencia en Primaria: dolor torácico; abordaje del paciente difícil; la comunicación de malas noticias.
En todos ellos, se evalúan competencias en anamnesis, exploración física, comunicación verbal y no verbal, diagnóstico diferencial, plan terapéutico, etc.
Los y las estudiantes de medicina que realizaron nuestro programa de preparación aprobaron su ECOE y refieren haber tenido menor ansiedad durante su realización.
Los y las especialistas y residentes en Medicina Familiar y Comunitaria desempeñamos un rol fundamental en la docencia pregrado, no solamente durante el último año de grado, sino durante los otros 5 años. En tanto que centros docentes asociados a la Universidad, no podemos resignarnos solamente a aceptar rotatorios de estudiantes de medicina, sino tomar también un rol activo en su formación universitaria, realizando docencia y aportando todas aquellas competencias de las cuales la Medicina de Familia es referente, lidera y sabe liderar.
Es un proyecto fácilmente aplicable ya que preparar 6 casos es sencillo y se pueden reutilizar posteriomente.
Además, cerrar la agenda durante 1 hora semanalmente puede ser viable para la mayoría de profesionales.