XXXIII Congreso de Comunicación y salud
del 25 al 27 de abril 2024
Ofrecer a los pacientes con demencia que acuden a la consulta con trastornos de conducta un espacio nuevo y seguro donde sentirse empoderados y mejorar la comunicación médico-paciente.
Aristóteles creó una escuela filosófica única que consistía en pasear con sus discípulos por un jardín (peripatéticos), convencido de que el caminar activa la mente, potencia la observación y evita la rutina, manteniendo a los alumnos activos y atentos.
Iniciamos un modelo de entrevista especialmente dirigida a pacientes con demencia. Acompañados de familiares que sólo sentarse relatan los comportamientos alterados. Frecuentemente los pacientes se muestran inquietos, intranquilos, agredidos. En estos casos, ofrecemos al paciente que nos acompañe a dar un paseo por el jardín del centro. En la oportunidad de salir del despacho, se manifiesta lo que hay, con su lenguaje no interpretado por el entorno familiar. La sorpresa hace emerger algo más genuino y espontáneo. Se observa la cadencia de la marcha, el ritmo, se explora el dual-task. Las familias quedan en compañía de la enfermera recibiendo educación de manejo no farmacológico. Otras veces, el paseo se ofrece al familiar, ofreciendo otra visión del cuidado del familiar enfermo.
En situaciones conflictivas donde se detecta mucha incomodidad por parte del paciente o de la familia durante la exposición de los problemas, ofrecer un espacio abierto para pasear mientras se recoge la información aporta riqueza y facilita una comunicación más genuina que puede incidir en una mejor orientación de los problemas y tratamientos más dirigidos.
El feed-back de los pacientes y familias es muy satisfactorio y al profesional le brinda la adquisición de nuevas competencias comunicativas.