XXXIX Congreso de la semFYC - Málaga
del 9 al 11 de mayo de 2019
Urgencias.
Cambio del comportamiento tras traumatismo craneoencefálico (TCE) ayer.
Enfoque individual
Paciente con hipertensión arterial y bebedor excesivo, acude a urgencias por segunda vez desde ayer. Presentó caída accidental con posterior TCE ayer, por lo que acudieron a urgencias para valoración. Tras TC craneal sin hallazgos relevantes y sin focalidad neurológica se derivó a domicilio. Hoy acude de nuevo porque los familiares ven un cambio en el comportamiento desde ayer, con desorientación en espacio y tiempo, agitación y dificultad para la marcha. Se decide volver a realizársele analítica y TC craneal para ver si hay organicidad que justifique el cuadro. Las pruebas complementarias son anodinas y al revalorar al paciente, empieza a tener alucinaciones. Se rehistoria a la familia, que nos cuentan que desde el traumatismo no ha vuelto a beber nada, por lo que nos hace sospechar como primera opción una deprivación de alcohol.
Enfoque familiar y comunitario
En el proceso fue importante la familia ya que el paciente no estaba orientado ni colaborador. Al hablar con ellos tras las pruebas complementarias anodinas, detallaron que desde la caída no había vuelto a beber, teniendo como primera opción la deprivación del alcohol.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Diagnóstico diferencial: Conmoción cerebral tras TCE, accidente cerebrovascular, deprivación de alcohol (Delirium tremens), alteración de algún valor en la analítica que pueda justificar el cuadro.
Juicio clínico: Delirium Tremens.
Tratamiento y planes de actuación
Se le administró Tiamina y Midazolam. Al permanecer el paciente con agitación y componente alucinatorio, se administró haloperidol. Hubo que darle antihipertensivos.
Evolución
Se empezó el tratamiento en observación de Urgencias para estabilizar al paciente. Tras disminuir la agitación y las alucinaciones se ingresó en planta, con buena evolución y posterior alta.
Este caso es interesante porque de primeras parece que el cambio de comportamiento es debido al traumatismo, opción más frecuente y que hay que descartarla. Tras ver que no se debe al traumatismo, hay que seguir buscando una causa ya que clínicamente era evidente que el paciente no podía irse de alta.