XXXVIII Congreso de la semFYC – Barcelona
del 10 al 12 de mayo de 2018
Servicios Urgencias
Caso multidisciplinar
Cefalea
Enfoque individual
HISTORIA CLÍNICA
Varón de 39 años, sin hábitos tóxicos
APP: HTA
Medicación habitual: Llosartán 50mg QD
Anamnesis
Frecuentador habitual del servicio, cefaleas de 7 meses de evolución, con 3 – 5 episodios al día controlados parcialmente con analgesia oral y miorelajantes pautados por médico de cabecera. Dolor descrito como intenso, holofrontal, irradiado hacia hombros, duración máxima de un minuto, acompañado de mareos y vómitos ocasionales.
Examen físico
Exploración física anodina; exploración neurológica normal.
SIN EMBARGO, tras la exploración, paciente se inclinó para atarse uno de sus zapatos y se evidenció episodio de cefalea y mareo compatibles con lo descrito.
Se esperó la recuperación de su estado, sin ninguna intervención salvo contención física.
Se reinterrogó al paciente por si recordaba algo más que agregar y tras limpiarse la nariz, mencionó que en un par de ocasiones, tras realizar algún sobreesfuerzo físico, había notado “como hoy, salida de líquido por la nariz”.
Enfoque familiar
Extranjero, lusófono, casado, llegado hace un año a la ciudad. Trabajador en la construcción
Desarrollo
Incremento de presión intracraneal
Tratamiento
Con este dato de alarma, paciente fue derivado a servicio de neurología quienes orientaron el caso como cefalea de perfil cervicogénico con mareo asociado aunque también solicitaron una angioresonancia magnética cerebral y cervical para descartar un posible aneurisma.
El resultado de la RMN reportó una masa intraventricular paramedial que producía dilatación ventricular moderada supratentorial y efecto de masa sobre el ventrículo lateral izquierdo.
Tratamiento
Traslado urgente al servicio de Neurocirugía de otro hospital en donde fue intervenido para extracción de la lesión que fue compatible con un subependimoma grado I.
Evolución
Tras intervención quirúrgica, sin incidencias, el paciente se recuperó sin ninguna secuela.
Ante cuadros de tan larga evolución y, a pesar del buen aparente control del motivo de consulta, muchas veces son los “pequeños detalles” los que nos ayudan a tener un enfoque más resolutivo que solo paliativo.