XLIV Congreso de la semFYC - Barcelona
14-16 de noviembre de 2024
Enfoque individual
Antecedentes de hipertensión arterial y dislipemia. Acude a consulta por cefalea temporal derecha de 48 horas y dolor con debilidad y limitación en cintura escapular y pélvica, junto a rigidez matutina de 2 meses de evolución. No claudicación mandibular, alteraciones visuales, fiebre, artritis periférica, síndrome constitucional u otra sintomatología.
A la exploración física destaca hipersensibilidad a la palpación del cuero cabelludo. Resto sin hallazgos a destacar.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Cumpliendo criterios de polimialgia reumática (PMR) y ante la sospecha de arteritis de células gigantes (ACG) asociada, se deriva a urgencias hospitalarias. Se realiza una analítica sanguínea urgente que muestra: velocidad de sedimentación globular (VSG) de 90 mm/h, proteína C reactiva (PCR) de 5 mg/dL con biología hepática, hemograma normal y factor reumatoide negativo.
Tratamiento y planes de actuación
Se inicia tratamiento con prednisona 1 mg/kg/día en dosis única, con posterior pauta descendente. Se deriva a Reumatología.
Evolución
Mejoría clínica significativa en las primeras 48 horas. Seguimiento clínico, con monitorización de VSG y PCR. Biopsia temporal que demuestra vasculitis con predominio de infiltrado inflamatorio mononuclear con formación de granulomas. Buena evolución sin recaídas por el momento.
Desde Atención Primaria es importante tener presente la sospecha diagnóstica de estas entidades y saber que ambas enfermedades se pueden presentar de forma aislada, pero en aproximadamente un 50% de los casos aparecen conjuntamente. El diagnóstico de la PMR es fundamentalmente clínico, existen unos criterios de clasificación que lo facilitan. La biopsia de la arteria temporal es la prueba de referencia para el diagnóstico de ACG, y la presencia de cefalea, episodios de claudicación mandibular o amaurosis fugaz en pacientes con diagnóstico de PMR, obliga remitirlos a urgencias hospitalarias para realizar las exploraciones pertinentes e iniciar el tratamiento.
El tratamiento inicial recomendado de ambas entidades son los glucocorticoides (GC), y sobre todo en el caso de la ACG, debe iniciarse de forma inmediata sin demorar el inicio a la confirmación diagnóstica. Será muy importante la prevención y el seguimiento de los efectos secundarios de la terapia.