XLII Congreso de la semFYC - Sevilla
del 30 de junio al 2 de junio de 2022
Atención Primaria
Enfoque individual
Antecedentes personales: Hipertensión arterial (hidroclorotiazida 25mg/día), insomnio (lorazepam 1mg/24h) y ansiedad (diazepam 5mg 40 comprimidos anual si precisa). Cambio de médico de familia en 3 ocasiones en los últimos años.
Enfoque familiar y comunitario
Viuda, vive en un piso de alquiler con su hija.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Pide dos visitas consecutivas al médico de familia para solicitar recetas de benzodiazepinas alegando robo. Se revisa el historial farmacoterapéutico y se detecta la recogida en farmacia de 22 cajas de lorazepam y 10 de diazepam en los últimos 9 meses, prescritas en visitas médicas en Urgencias Hospitalarias, Centro de Urgencias de Atención Primaria y Centro de Salud (visitas espontáneas con médico de urgencias, enfermería y médico de familia). Los motivos de consulta son contracturas musculares por sobreesfuerzos o accidentes banales, pérdida, robo u olvido de medicación en casa de familiares. En ellas, siempre consta la demanda activa de benzodiazepinas por parte de la paciente.
Tratamiento y planes de actuación
Se realiza una anamnesis dirigida pero la paciente niega abuso de fármacos. Cuando se aborda el aspecto social reconoce dificultades económicas, la hija no trabaja por patología crónica, viven de la pensión de viudedad. Cuando se le pide permiso para contactar con la hija, lo niega rotundamente y manifiesta evidente incomodidad y nerviosismo ante la petición.
Evolución
Control domiciliario con médico, enfermera y trabajadora social de referencia. Vivienda y condiciones de vida muy precarias, amenaza de desahucio. Sospecha de hija con dependencia a benzodiazepinas. Se alerta a los Servicios Sociales y al servicio de psiquiatría de zona.
A pesar de la coordinación entre los centros sanitarios asistenciales y los mecanismos de alerta del programa de prescripción farmacológica, existen patologías biopsicosociales que pueden pasar desapercibidas. Esta situación se agrava cuando el usuario no favorece la continuidad asistencial con su médico de Atención Primaria. Por otro lado, la pandemia por la infección de coronavirus también puede haber contribuido a la demora diagnóstica ya que ha dificultado enormemente la atención continuada e integral de los pacientes en los últimos 2 años.