Atención Primaria. Multidisciplinar.

Mujer de cuarenta y siete años acude a consulta de Ginecología derivada desde Atención Primaria para descartar causa ginecológica de sus dolores pélvicos. El ginecólogo se muestra inicialmente molesto con ella: "quién te ha enviado aquí".

Enfoque individual

Antecedentes personales: paraplejia postraumática. Infecciones urinarias de repetición. Anamnesis: Aumento de la espasticidad de miembros inferiores, desde hace un mes, y dolores pélvicos. Exploración: El ginecólogo accede a realizar la exploración tras la insistencia de la paciente, que, para subir a la camilla ginecológica, necesita la colaboración de dos auxiliares de clínica y la retirada de uno de los reposapiés. Ya en la camilla, la auxiliar debe sostener sus piernas para que no caigan mientras el médico hace la ecografía. Por último, hay que quitar de nuevo el reposapiés para que vuelva a su silla de ruedas.

Enfoque familiar y comunitario

Gestión de la diversidad/ inequidades en salud.

Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas

- Juicio clínico: Pólipo endometrial. Al anunciarlo, el ginecólogo ve entonces que la visita estaba justificada y a continuación afirma: “con una mujer de tu edad sabría cómo actuar, pero contigo…”.
- Diagnóstico diferencial: Absceso abdominal, Dolor pélvico, Infección urinaria.
- Identificación de problemas: Problemas de accesibilidad física e inequidad en el trato.

Tratamiento y planes de actuación

Polipectomía: Se realizan dos histeroscopias. Se encuentran 3 pólipos. Anatomía patológica: pólipo de hiperplasia glandular simple.

Evolución

El ginecólogo afirma que el tratamiento indicado es claro, pero tal vez no para la paciente, porque, ¿cómo podría acceder a la camilla para hacer la intervención? La paciente contesta que a la de esa consulta habían subido y que en el hospital habría ayuda también. El médico le da el volante para la intervención y se despiden.

Este es un caso de inequidad en salud por discapacidad. Ante la discapacidad como factor de inequidad en salud, las y los profesionales del sistema de salud deben ampliar el concepto de paciente para que las personas con discapacidad dejen de ser las inesperadas. Para ello, se debe extender la formación sobre la discapacidad como teoría para comprender, clasificar y tratar el menoscabo corporal (en su pleno significado). Así, se reconocerá el sesgo que dirige a las personas con discapacidad a servicios especializados, como pasa en general en la sociedad.