Atención Primaria y Comunitaria.

Mujer de 73 años que acude por alteración del estado de ánimo.

Antecedentes de hipertensión arterial, depresión y migraña. Ama de casa y cuidadora de un paciente crónico.
Acude por apatía, irritabilidad y astenia tras acontecimiento vital estresante de más de 6 meses de evolución. Refiere, además, despistes ocasionales y algún episodio de cefalea.
Exploración neurológica correcta. Test LOBO 35. Pfeiffer 0. PHQ-9: 5 puntos.
Estudio analítico: calcio, vitamina B12, fólico y TSH normal. Serologías negativas.

Se diagnostica de trastorno del ánimo depresivo secundario a proceso adaptativo y se inicia tratamiento ISRS.

Valorada también por Salud Mental. Se realiza seguimiento durante más de 6 meses por su médico de cabecera sin objetivar mejoría a pesar de los cambios de tratamiento y la intervención psicoterapéutica en Atención Primaria. Dado que este conoce bien a la paciente, el entorno y su soporte familiar, y no le parece que el resultado sea el esperado, decide solicitar un TAC de cráneo. Este informa de la existencia de un macroadenoma hipofisario de 48 mm con crecimiento supraselar. La RM describe también afectación del quiasma óptico.
Se repite analítica con ACTH, cortisol y glicemia normal. T4L 0,65 ng/dL y TSH 4,23 mUI/L. Prolactina seriada 24 ng/mL.
Días después la paciente inicia cuadro de hemianopsia bitemporal, poliuria y polidipsia.

Se interviene por vía endoscópica y se inicia tratamiento sustitutivo (hidrocortisona y levotiroxina).

Al evaluar una alteración del ánimo, el médico de Atención Primaria considera las características psicológicas, sociales, culturales, físicas y el entorno social del paciente, que determinan las cualidades y la evolución del trastorno. En Atención Primaria, las alteraciones de la esfera emocional y los trastornos de adaptación son motivo de consulta frecuente. Ante un trastorno del ánimo de características atípicas, sin la evolución esperada y ante ciertos signos de alerta, cabe revalorar diagnósticos alternativos.

Nuestra especialidad puede permitir adelantarnos a un diagnóstico que no hubiésemos sospechado sin la cercanía al paciente y al entorno del mismo que encontramos en la Atención Primaria.