XXXVII Congreso de la semFYC – Madrid
del 4 al 6 de mayo 2017
Evaluar el grado de control uricémico en pacientes diagnosticados de gota
Diseño-ámbito: Análisis descriptivo retrospectivo, realizado en el ámbito de atención primaria en 8 cupos de dos centros de salud urbanos
Criterios selección: De entre los pacientes mayores de 14 años atendidos en el último año, seleccionamos a todos los pacientes diagnosticados de gota en algún momento, n=231.
Se determinaron variables demográficas, fármacos relacionados con la gota y niveles de uricemia en el último análisis.
Análisis estadístico: comparamos la adecuación de los niveles de ácido úrico con los recomendados por la Guía de la European League Against Rheumatism (EULAR) de 2016 http://ard.bmj.com/content/76/1/29?etoc
Limitaciones: Sólo se utilizó un valor aislado de uricemia. No se analizaron dosis de medicamentos. No se clasificó la gravedad de la gota.
Aspectos ético-legales: Se utilizó la aplicación Consultaweb que permite el estudio sin identificar a los pacientes.
Analizamos 231 pacientes, edad media 70.1 años [Intervalo de Confianza (IC95%) 68.3-72.0], 189 (81.8%) varones. La uricemia media fue 6.55 mg/dL (IC95% 6.31-6.79 mg/dL). El 39% estaba adecuadamente controlado según EULAR (ácido úrico <6 mg/dL), 25.5% ligeramente elevado (6-7 mg/dL) e inadecuado (>7 mg/dL) en 35.5%, llegando a control pésimo (ácido úrico >9 mg/dL) un 10%.
No hubo diferencia significativa entre el control en varones 6.58mg/dL (IC95% 6.33-6.83) y mujeres 6.40 mg/dL (IC95% 5.73-7.07); pero el control mejoraba con la edad: <60 años 7.01 mg/dL (IC95% 6.60-7.42) frente a >70 años 6.30 mg/dL (IC95% 6.00-6.60)
Los 14 pacientes en tratamiento con febuxostat alcanzaron similar control uricémico que quienes utilizaron alopurinol (6.5 vs. 6.7mg/dL).
El grado de control de uricemia en pacientes gotosos es mayoritariamente inadecuado conforme a recomendaciones EULAR. Considerando valores algo menos exigentes (<7mg/dL), solo un tercio presentarían cifras realmente elevadas. En pocos casos el control es pésimo. Los pacientes peor controlados fueron los más jóvenes, sin que encontrásemos diferencia por sexos.