XL Congreso Nacional y I Congreso Virtual de la semFYC - Valencia
del 15 de septiembre al 6 de octubre de 2020
Atención primaria.
Hiperglucemia, debilidad muscular y aumento de peso.
Enfoque individual
Mujer de 50 años con antecedente de asma bronquial, automedicada con Prednisona 45 mg al día desde hace 3 años para control de síntomas sin seguir controles médicos. No otros antecedentes de interés.
Acude al ambulatorio por hallazgo casual de glucemia 345 mg/dL tras caída, debilidad muscular y aumento de peso.
A nuestra valoración en consulta presenta glucemia capilar de 177 mg/dL y cifras elevadas de tensión arterial (155/105mmHg). A la exploración física se objetiva obesidad troncular con presencia de estrías rojo vinosas en abdomen y cara en luna llena. Peso 78 kg (previo 73 kg).
Solicitamos analítica sanguínea en la que destaca glucemia basal 219 mg/dL y HbA1c 9,7%.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Se orienta como síndrome de Cushing exógeno y diabetes mellitus secundaria a corticoterapia.
Tratamiento y planes de actuación
Iniciamos pauta descendente de Prednisona, ajustamos tratamiento broncodilatador, iniciamos Metformina 850 mg cada 12 horas, Alendronato semanal 70 mg y Calcio/VitD. Solicitamos densitometría ósea, hacemos interconsulta a endocrino y citamos en una semana.
Evolución
La paciente acude en varias ocasiones al ambulatorio para control evolutivo. Ya en primera visita de control refiere mejoría del estado general, presentando normalización de cifras tensionales y disminución de glucemia capilar.
Recibimos respuesta de endocrino desaconsejando insulinizar en este contexto dada la ausencia de clínica cardinal y recomendando mantener tratamiento con Metformina más disminución progresiva de corticoides.
En última visita paciente asintomática. Disminución de peso (71,5 Kg), TA 117/87 mmHg y glucemia capilar de 106 mg/dL. Recibimos resultado de densitometría ósea con T-Score de columna lumbar y cuello femoral en rango normal, descartando así osteoporosis y osteopenia. Suspendemos Prednisona y solicitamos analítica de control con nueva determinación de HbA1c.
Estamos ante una paciente que ha desarrollado un síndrome de Cushing yatrógeno y una diabetes mellitus secundaria a corticoterapia tras automedicarse por 3 años. Diagnosticada y tratada en el ámbito de atención primaria con buena evolución clínica.
Este caso refleja el riesgo de la automedicación, ya que debe ser el médico quien prescriba el tratamiento y haga los controles posteriores para evitar complicaciones.