XXXVIII Congreso de la semFYC – Barcelona
del 10 al 12 de mayo de 2018
Atención Primaria
Caso multidisciplinar
Agitación y disnea
Enfoque individual
Varón de 90 años acude a servicio de urgencias rurales por cuadro de agitación nocturna asociado a disnea. AP: parcialmente dependiente para actividades básicas de la vida diaria con múltiples FRCV (cardiopatía isquémica en 2011, hipertensión arterial, dislipemia, glucemia alterada en ayunas), neoplasia próstata y fibrosis pulmonar.
Exploración:
TA 87/59. FC 86 lpm. SatO2 82%. FR 28 rpm. Afebril. No presenta cianosis. Auscultación pulmonar hipoventilación y crepitantes en ambas bases. No edemas.
Pruebas complementarias:
Electrocardiograma: ritmo sinusal a 80 lpm.
Radiografía tórax: fibrosis pulmonar con empeoramiento respecto a previa. No condensación.
Analítica: leucocitosis, lactato 22.2 y Dímero D 80540.
TAC torácico: no tromboembolismo. Fibrosis.
Enfoque familiar
Buena red de apoyo familiar
Desarrollo
Diagnóstico diferencial: cuadro ansioso, TEP, empeoramiento fibrosis pulmonar, infección respiratoria.
Juicio clínico: Infección respiratoria
Tratamiento
Se ingresa a la paciente en Neumología donde se le administra antibioterapia intravenosa (Levofloxacino), esteroides y diuréticos. Continúa tratamiento con oxigenoterapia.
Evolución
Inicialmente se administra Alprazolam 0.5mg sin mejoría del cuadro clínico. Se administra oxigenoterapia con mejoría de la saturación, pero ante la clínica y los antecedentes personales se deriva a urgencias del hospital. Durante el ingreso el paciente continúa afebril y mejora del cuadro de agitación. Al alta afebril, sin disnea ni agitación nocturna. Se pauta Oxigenoterapia domiciliaria
La agitación en pacientes ancianos es un cuadro muy común que se caracteriza por la aparición brusca, la clínica fluctuante y tiene un gran impacto en la calidad de vida de los pacientes y los cuidadores.
La causa puede ser múltiple o única, siendo las más comunes los trastornos metabólicos, las infecciones, los ictus y los fármacos.
El tratamiento debe comenzar buscando y tratando la causa, medidas ambientales y finalmente tratamiento farmacológico si precisa siendo el tratamiento de primera linea los neurolépticos como el Haloperidol.
El dímero D es un parámetro con un alto valor predictivo negativo, lo que significa que debemos solicitarlo cuando exista un riesgo bajo de presentar trombosis. En nuestro caso el paciente presentaba un índice de Wells de 1 (riesgo bajo) por lo que el dímero D está solicitado correctamente.