XXXIII Congreso de Comunicación y salud
del 25 al 27 de abril 2024
Síncope.
Enfoque individual
Hombre de 78 años, que acudió en ambulancia al servicio de urgencias por síncope no presenciado tras ser rescatado por la guardia civil en el monte. En el interrogatorio el paciente refirió que estaba dando su paseo matutino y tuvo caída con pérdida de conocimiento, sin recordar en ningún momento haber presentado disnea, ni dolor torácico. En su historial destacaba: accidente cerebrovascular con secuela leve de parálisis facial inferior, hipertensión arterial, síndrome de apnea-hipopnea del sueño severo controlado con ventilación mecánica no invasiva tipo CPAP e insomnio con prescripción activa de lormetazepam.
Enfoque familiar y comunitario
Su hijo acudió posteriormente al servicio de urgencias y lo encontró en su situación basal. Reinterrogando comentaron que podía existir la posibilidad de que se hubiese confundido con la medicación y hubiera tomado algún lormetazepam extra esa mañana. Además, su hijo nos indicó que sufrió un tromboembolismo pulmonar con ecocardiograma normal hace un par de años.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
En la telemetría se objetivó disfunción sinusal a 32 - 35 latidos por minuto. Se descartó hemorragia cerebral y tromboembolismo pulmonar por tomografía computarizada. Aunque las benzodiacepinas pudieron ocasionar sedación, el paciente en ningún momento se encontró somnoliento, ni letárgico. Finalmente se diagnosticó cuadro de síncope de perfil cardiogénico.
Tratamiento y planes de actuación
Ante un síncope de perfil cardiogénico con bradicardia sinusal y frecuencias cardíacas entorno a 35 latidos por minuto, se ingresó con telemetría en la planta de cardiología. Se valoró el caso en sesión clínica donde se indicó implante de marcapasos que fue rechazado por el paciente hasta en 3 ocasiones.
Evolución
El paciente durante su ingreso tuvo una actitud activa sobre su tratamiento rechazando el marcapasos y manifestando entender los riesgos. Solicitó el alta voluntaria. Como recomendación el servicio de cardiología aconsejaba evitar fármacos cronotropos negativos como los betabloqueantes, la amiodarona, la digoxina y los calcioantagonistas.
Este caso pone al paciente en el centro del sistema sanitario respetando el principio de autonomía y haciéndole parte activa de su proceso de salud. Es un ejemplo de respeto en el que la comunicación bilateral adecuada hace que el paciente esté satisfecho con su tratamiento sin necesidad de intervención farmacológica o quirúrgica.