13-14-15 de noviembre de 2025
Paciente mujer de 57 años con antecedente de hipertensión arterial y dislipemia, que acude por lesiones cutáneas de semanas de evolución que son pruriginosas e inician en tobillos y ascienden de forma progresiva hacia rodillas y resto de extremidades incluyendo palmas y plantas, así como tronco. Respetan zona facial y cuero cabelludo. Niega transgresiones dietéticas o de su medicación habitual. Niega viajes recientes o uso de nuevas cremas hidratantes, desodorantes o detergentes. No relaciones sexuales de riesgo.
En la exploración física presenta pápulas poligonales violáceas con pequeñas estrías blanquecinas, algunas confluyentes formando grandes placas. No presenta lesiones en cavidad bucal ni zona genital. No lesiones ungueales. Auscultación cardiopulmonar sin hallazgos patológicos, abdomen anodino y sin edemas de MMII. Resto de exploración normal.
Ante un diagnóstico diferencial con psoriasis «en gotas», sífilis secundaria, liquen plano o granuloma anular, se decide pautar antihistamínico vía oral y tratamiento corticoideo tópico. Se realiza serología que resulta negativa y se deriva a Dermatología para realización de biopsia cutánea que confirma el diagnóstico de liquen plano. Se inicia tratamiento con prednisona vía oral en pauta descendente durante 3 semanas.
El liquen plano es una enfermedad inflamatoria idiopática que afecta a piel y mucosas producida por una reacción inmunológica mediada por linfocitos T. Presenta una evolución variable. Afecta principalmente a adultos de mediana edad. Las formas orales predominan en mujeres y presentan mayor riesgo de cronificación. Se diagnostica clínicamente visualizando pápulas pequeñas, poligonales, brillantes, de superficie aplanada, en ocasiones con umbilicación central. En la superficie de la pápula se puede observar un punteado o líneas blanquecinas conocidas como estrías de Wickham. Su coloración puede ser inicialmente roja, virándose rápidamente a violáceo o pardusco. El prurito suele ser intenso. El tratamiento se enfoca en controlar la inflamación con corticoides y antihistamínicos orales de forma inicial, pudiendo recurrir a retinoides o inmunosupresores.
