13-14-15 de noviembre de 2025
Hija de varón de 77 años consulta por notable agresividad verbal e irritabilidad de su padre en los últimos meses, coincidiendo con un cambio farmacológico.
Enfoque individual
Jubilado, vive con esposa. Dislipemia, HTA, Epilepsia y Temblor Esencial.
Enfoque familiar y comunitario
Esposa de 75 años se muestra sobrepasada. Hija preocupada, constituye el principal apoyo externo. Residen en vivienda urbana adaptada, con situación socioeconómica favorable. Familia muy implicada.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Alteración conductual con agresividad en paciente anciano, altamente sugestiva de reacción adversa a medicamento (RAM) a Perampanel.
RAM a Perampanel (agresividad es efecto descrito), exacerbación de rasgos de personalidad previos, inicio de deterioro cognitivo.
Agresividad y alteración conductual, necesidad de control de temblor, sobrecarga familiar, divergencia en la percepción del problema paciente/familia.
Tratamiento y planes de actuación
Se contacta con Neurología exponiendo la sospecha de RAM y valorando conjuntamente el balance riesgo-beneficio. Tras nueva entrevista con el paciente y su familia, y en un proceso de decisión compartida con Neurología, se acuerda inicialmente mantener la dosis de Perampanel 2mg/día, con seguimiento estrecho y coordinado desde Atención Primaria.
Evolución
En la siguiente visita, un mes después, la agresividad presenta leve disminución, disminuyendo así el impacto familiar y la limitación funcional por el temblor que presentaba anteriormente. Ante la leve mejoría conductual, en nuevo consenso (Neurología, Médico de Familia, paciente y familia), se decide mantenimiento de Perampanel hasta próxima visita.
Este caso resalta el rol crucial del Médico de Familia en la detección y manejo de RAM conductuales en ancianos polimedicados y la importancia del abordaje familiar. La atención longitudinal y el conocimiento del paciente y su entorno son claves. La comunicación efectiva, la validación de las preocupaciones familiares, la coordinación interdisciplinar y la toma de decisiones compartida demuestran ser esenciales para un abordaje biopsicosocial exitoso. En este caso se priorizó el bienestar del paciente sin restar importancia a la convivencia familiar.