13-14-15 de noviembre de 2025
Optimizar el diagnóstico de apnea obstructiva del sueño (AOS) mediante un circuito de derivación directa desde atención primaria (AP) a la prueba diagnóstica, consensuando la calidad de la valoración clínica hecha en AP a través de un formulario estructurado.
En nuestro territorio, el procedimiento habitual para estudiar AOS implica derivar al paciente al neumólogo referente, quien solicita pruebas y prescribe tratamiento en una segunda visita. Este proceso puede demorarse más de un año, y hasta el 40 % de las consultas de neumología son por sospecha de AOS. Además, no existe consenso sobre el papel de AP en la valoración inicial.
La nueva experiencia propone un circuito ágil: desde AP, tras una valoración clínica multidisciplinar (colaboración de médica, enfermera, auxiliar de enfermería y administrativa sanitaria), se deriva virtualmente a una neumóloga experta en AOS mediante interconsulta sin paciente.
Se ha consensuado un formulario clínico de derivación que recoge datos clave recomendados: edad, sexo, profesión, comorbilidades (especialmente vasculares), síntomas (ronquidos, apneas presenciadas, somnolencia diurna, etc.), exploración física (peso, talla, IMC (índice de masa corporal), Mallampati, cuestionario de somnolencia Epworth) y pulsioximetría nocturna: Saturación de oxígeno media, CT90 (porcentaje de tiempo con saturación menor a 90), ODI3 (Desaturaciones ≥3% por hora).
La especialista revisa la solicitud e indica la poligrafía o la polisomnografía. El paciente se cita directamente para la prueba: Puede no tener AOS, presentar AOS leve o moderado (tratado por el neumólogo referente), o AOS complejo (seguimiento por unidad especializada). En todos los casos se entregan recomendaciones higiénico-dietéticas.
El consenso entre AP y la unidad especializada, junto con la derivación directa para realizar la prueba diagnóstica, reduce demoras y mejora la calidad.
El formulario de datos mínimos y la derivación directa a pruebas es replicable en otros territorios y promueve la implicación activa de AP en el proceso diagnóstico, favoreciendo una atención más eficiente.