Derrame pericárdico severo como primer hallazgo en la consulta de Atención Primaria (Póster)
Ámbito del caso
Centro de salud de entorno urbano.
Motivos de consulta
Hombre de 82 años que acude a consulta por astenia y pérdida de peso no cuantificada de varios meses de evolución. No otra clínica acompañante.
Historia clínica
Enfoque individual
Antecedentes personales de diabetes mellitus tipo 2 insulinodependiente con mal cumplimiento terapéutico. A la exploración física destacan únicamente mínimos crepitantes bibasales.
Hallazgos ecográficos
Se realiza ecografía clínica abdominal en consulta en la que se objetivan los siguientes hallazgos: ecoestructura hepática homogénea con longitud en el límite alto de la normalidad (14,77 cm). Vena cava inferior dilatada (1,98 cm) con un índice de colapsabilidad disminuido (en torno al 40%). Derrame pleural bilateral. En un corte subxifoideo se objetiva derrame pericárdico severo.
Pruebas complementarias
Exploraciones complementarias: se solicita analítica en el que se objetiva colestasis disociada.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
El paciente fue derivado al servicio de Urgencias, donde se le realizó un ecocardiograma reglado siendo diagnosticado de taponamiento cardíaco y procediéndose a la subsiguiente pericardiocentesis de un exudado serohemático de 1500 ml.
Tratamiento y planes de actuación
Finalmente, el paciente fue diagnosticado de cáncer de pulmón estadio IV, con infiltración pleuropericárdica.
Evolución
El paciente se encuentra pendiente de valoración por parte de Oncología.
Conclusiones (y aplicabilidad para la Medicina de Familia)
Dentro de las múltiples causas de colestasis disociada figuran la patología hepática y biliar, autoinmunes, sistémicas o medicamentosas. El abordaje de la colestasis parte de la historia clínica y del examen físico. La ecografía abdominal se considera el mejor método de examen inicial para el paciente con colestasis debido a su sensibilidad, especificidad, inocuidad y rapidez. Además de descartar la obstrucción biliar intra o extrahepática, se pueden detectar ascitis, esplenomegalia y signos indirectos de hipertensión portal, entre otros hallazgos. La congestión hepática, en nuestro caso, era la causa de la colestasis. La extensión del estudio ecográfico a corte subxifoideo y a un paraesternal eje largo nos permitió identificar signos ecocardioscópicos mayores de taponamiento cardíaco como el colapso de la aurícula derecha durante la diástole. La identificación, por tanto, de estos hallazgos en la consulta de Atención Primaria gracias a la ecografía clínica, permitió el abordaje precoz del paciente cuando aún se encontraba hemodinámicamente estable.
Comunicaciones y ponencias semFYC: 2024; Comunicaciones: Casos clínicos. ISSN: 2339-9333