Enfoque individual

Se presentan dos casos de abdominalgia aguda de 24-48 horas que no ceden a analgesia. Sin vómitos ni diarrea. Analíticas con leucocitosis con aumento de neutrófilos y PCR > 150mg/L. A diferenciar:

CASO A: Varón,48 años, con HTA y dolor a palpación de flanco y fosa iliaca izquierda. Pico febril 38ºC. Urinanálasis normal. Ecografía abdominal urgente: diverticulitis aguda en sigma.

CASO B: Mujer,23 años, sin antecedentes reseñables. Dolor en fosa iliaca derecha. Puño percusión negativa. Afebril. En analítica coagulación alterada. Urinanálasis con leucocitos y nitritos positivos.

Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas

Caso A: Diverticulitis en sigma

Caso B: Pielonefritis

Se exponen dos casos de abdomen agudo, otros diagnósticos a tener en cuenta según edad y sexo de los pacientes son:

Caso A (varón, dolor cuadrante inferior izquierdo): EII, hernia inguinal, cólico nefrítico, patología testicular…

Caso B (mujer,cuadrante inferior derecho): apendicitis, embarazo ectópico, enfermedad inflamatoria pélvica, EII, hernia inguinal…

Tratamiento y planes de actuación

Caso A: ingreso en Cirugía general con tratamiento médico.

Caso B: alta y tratamiento ambulatorio con Cefixima y AINEs.

Evolución

Caso A: favorable con alta a los pocos días. Se explican indicaciones dietéticas y tratamiento profiláctico Rifaximina.

Caso B: Consulta a los 2 días por persistir sintomatología ahora con dolor irradiado a fosa renal derecha. Ecografía abdominal urgente: Litiasis renales. Sin más hallazgos. Ante la clínica se completa con TC donde se aprecian 3 colecciones intrapélvicas sugerentes de enfermedad inflamatoria pélvica. Ingresa en Ginecología y se realiza salpinguectomía bilateral total urgente. Evolución favorable y alta a los 3 días.

Los cuadros de dolor abdominal son muy frecuentes en consultas de atención primaria y urgencias.Una anamnesis detallada y una exploración física rigurosa son fundamentales para orientar el diagnóstico y plantear un tratamiento o una derivación hospitalaria, así como la individualización de cada caso ya que, como bien es sabido, no tratamos enfermedades sino pacientes. De ahí la decisión de aportar estos casos en los que un mismo cuadro puede tener varias evoluciones y finales diferentes. En el caso B se dio un primer diagnóstico erroneo al fijarse más en los datos analiticos.

Ambos pacientes se beneficiaron de una derivación urgente pero  otras patologías pueden tratarse ambulatoriamente con seguimiento desde consulta.