XXXIX Congreso de la semFYC - Málaga
del 9 al 11 de mayo de 2019
Atención Primaria.
Caso multidisciplinar.
Paciente que consulta por dolor centrotorácico transfixiante de aparición súbita de madrugada, intensidad 7/10 que no ha mejorado tras la administración de metamizol de madrugada, ni con una segunda dosis por la mañana.
Enfoque individual
Hombre de 39 años, fumador de 2 cig/dia. Colitis ulcerosa en tratamiento con mesalazina.
Presenta dolor centro torácico transfixiante con EVA 7/10 sin cambios a pesar de analgesia oral desde esta madrugada. Empeora con la inspiración. Se acompaña de náuseas.
Exploración física:
AC: soplo aórtico 3-4/6 (audible también en focos pulmonar y mitral) no irradiado a carótidas, no soplo abdominal.
AR: murmullo vesicular. SatO2 basal 97%.
TA brazo derecho 142/56 mmHg brazo izquierdo 134/62.
Pulsos pedios presentes y simétricos. TA tobillo derecho: 180/- tobillo izquierdo: 230/-.
ECG: RS 60x', eje 0º, pr 0.15, no HVE. No alteraciones agudas de la repolarización.
Se administra 1 comprimido de cafinitrina, persistiendo dolor de intensidad 6/10.
Se coloca vía endovenosa.
Casado, padre de dos niños de 3 y 5 años. Su padre tuvo un aneurisma de aorta.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Ante el dolor transfixiante de inicio súbito, intenso y acompañado de vegetatismo y soplo aórtico sospechamos disección aórtica. Se decide determinar TA en 4 extremidades, la diferencia encontrada nos lleva a sospechar una pseudohipotensión por afectación de los troncos braquiocefálicos.
Diagnóstico diferencial: cardiopatía isquémica, aneurisma aórtico, pericarditis, pleuritis, tromboembolismo pulmonar, patología músculo-esquelética.
Se solicita traslado urgente a hospital de referencia, donde se le realiza TC torácica que confirma Aneurisma de aorta ascendente de 5 cm de diámetro máximo. Disección aórtica tipo A de Stanford.
Paciente intervenido de urgencia con sustitución de aorta ascendente y resuspensión valvular aórtica.
Evoluciona favorablemente.
La disección aórtica es una urgencia médica, cuyo pronóstico y supervivencia dependen de un diagnóstico precoz, y de la instauración temprana de tratamiento. Su detección en atención primaria requiere un alto índice de sospecha ante una clínica y una exploración física compatible, dado que no podemos realizar pruebas de imagen.
El riesgo de complicación de un aneurisma de aorta no depende únicamente del tamaño, también aumenta ante antecedentes familiares de aneurisma de aorta, síndrome aórtico agudo o muerte súbita. Sobretodo ante familiares de primer grado (hermanos, padres o hijos).