XXXVII Congreso de la semFYC – Madrid
del 4 al 6 de mayo 2017
Atención Primaria y Hospitalaria.
Caso multidisciplinar.
Disnea.
Enfoque individual
Antecedentes personales: Paciente mujer de 79 años, con antecedentes personales de hipertensión arterial e insuficiencia cardíaca en tratamiento actual con irbesartan, lercanidipino, bisoprolol.
Anamnesis: Diagnosticada a final de octubre de 2015 tras sufrir una caída de fractura helicoidal de peroné derecho. Tratada mediante la aplicación de férula, reposo y enoxaparina y tratamiento analgésico a demanda. Tras un mes de evolución es evaluada por Traumatología retirándosele la férula, se le indica otro mes más de reposo y continuar con el mismo tratamiento.
A final de noviembre acude a revisión por cardiología, indica que está estable sin disnea. En la exploración detecta mínimos crepitantes basales, se suspende bisoprolol y se pauta furosemida.
Un mes más tarde (enero 2016) la paciente comienza rehabilitación, a los pocos días de comenzarla acude a nuestra consulta de primaria refiriendo tener sensación de disnea y edemas miembros inferiores.
Exploración: PA: 145 mmHg, Saturación de oxígeno: 91%. Auscultación cardiorespiratoria: Rítmica 110lpm, crepitantes bibasales, miembros inferiores: Edemas con fóvea ++/+++ hasta rodillas, con signos de Homman positivo, pulsos periféricos disminuidos. Electrocardiograma: Taquicardia sinusal a 110lpm, no signos de isquemia.
Se decide traslado hospitalario asistido por equipo de urgencias extrahospitalarias.
Pruebas complementarias: Eco doppler: Trombosis venosa profunda en ambos miembros inferiores; TAC tórax: Tromboembolismo pulmonar masivo.
Desarrollo
Tromboembolismo pulmonar, trombosis venosa profunda miembros inferiores.
Diagnóstico diferencial: Insuficiencia cardíaca descompensada, trombosis.
Tratamiento
Anticoagulación entre seis meses y un año con acenocuramol.
Evolución
En la revisión en mayo presenta disnea de moderados-severos esfuerzos y en la gammagrafía pulmonar hay importante mejoría con respecto al estudio previo de enero 2016, persisten defectos de perfusión en segmento apical posterior y anterior de lóbulo superior derecho y en anterior de lóbulo superior izquierdo.
La prevalencia de TEP se sitúa entre el 2% y 10% en pacientes traumatizados, pudiendo alcanzar una mortalidad por esta causa que alcanza el 15%-50%.
Cuando un paciente acude en diversas ocasiones a nuestra consulta de primaria estando un periodo prolongado en reposo (en este caso fueron dos meses) por fractura de miembro inferior, aunque este con enoxaparina, debemos de explorarlo y solicitar las pruebas que creamos oportunas pensando en el riesgo de trombosis.