Atención Primaria. 

Sí. 

Dolor dental. 

Enfoque individual

Paciente de 59 años que acude a consulta del centro de salud por dolor dental (piezas dentales 34 y 35) sin fiebre ni clínica infecciosa asociada. No procedimientos odontológicos recientemente. Como antecedentes personales presenta hipertensión arterial, dislipemia y enfermedad por reflujo gastroesofágico. Hábitos tóxicos: fumador 10 cigarrillos/día (hace dos años fumaba 2 paquetes/día). En tratamiento habitual con: Omeprazol 20 mg/24h, Atorvastatina 20 mg/24h e Irbesartán 300 mg/24h.

Exploración física: se aprecia una lesión blanca, que no se desprende al raspado en el suelo de la boca, en el frenillo lingual y en la base de las piezas dentales 34 y 35, de bordes irregulares de color blanco homogéneo.

Enfoque familiar y comunitario

Casado, buena relación con su mujer y sus dos hijos ya emancipados. Mantiene buen control del tratamiento. Barrio de nivel socio-cultura medio-alto.

Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas

Juicio clínico: Leucoplasia bucal.

Diagnóstico diferencial: candidiasis oral, liquen plano, leucoplasia vellosa, lengua geográfica, quemaduras químicas, verrugas vulgares, lesiones papilomatosas de origen viral, queratosis focal, nevus blanco esponjoso.

Identificación de problemas: A posteriori, ya que debido al incremento del uso de internet, el paciente había leído en una página web una posible transformación maligna de estas lesiones y presentó en consulta posterior temor por dicha causa por lo que se le explicó al paciente la sospecha clínica, la importancia del abandono del hábito tabáquico y la necesidad de un estudio histológico para confirmar la sospecha y vigilancia posterior de la lesión.

Tratamiento y planes de actuación

Se le recomienda dejar de fumar, una dieta equilibrada y se deriva a Cirugía Maxilofacial para realización de biopsia de la lesión. 

Evolución

Resultado biopsia: Leucoplasia con displasia leve. Revisiones cada 6 meses.

El médico de familia es básico en la determinación mediante la historia clínica de los posibles factores etiológicos asociados, en el diagnóstico precoz de esta patología para poder disminuir su tasa de transformación maligna y en aspectos preventivos como el abandono del hábito tabáquico ya que se conoce que los fumadores presentan 7 veces más riesgo de desarrollar esta lesión que los no fumadores, evitar el alcohol y eliminar cualquier factor irritativo de tipo mecánico.