II Congreso de Residentes, Tutores, JMF y UUDD
10 y 11 de mayo 2024
Enfoque individual
Mujer, 28 años. No alergias medicamentosas, antecedentes de interés ni medicación habitual. Consulta en urgencias del centro de salud por cuadro de 4-6 meses de evolución, con empeoramiento los últimos días, de dolor en ambas palmas tras el contacto con el agua. Explica tras exposición al agua maceración de ambas palmas, que en las últimas semanas ha empeorado en cuanto a gravedad y tiempo de aparición (tras 1-2 minutos de contacto con el agua). Además sensación de quemazón intensa, ardor, parestesias, también tras 1-2 minutos de contacto con el agua. Resolución de la clínica y las lesiones a los 30-40 minutos de parar la exposición al agua. No consumo de fármacos las últimas semanas. No hiperhidrosis. No descamación. Sensibilidad normal. Aporta iconografía de ambas palmas tras 2-3 minutos de contacto con el agua. Exploración física en consulta sin alteraciones. Sensibilidad normal.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Se realiza una búsqueda bibliográfica con la sintomatología de la paciente, siendo los síntomas, la exploración física y la iconografía aportada compatible con una queratodermia acuagénica.
Se realiza interconsulta a dermatología, quienes con la información clínica e iconografía también orientan como una queratodermia acuagénica.
Tratamiento y planes de actuación
Debido a la naturaleza autolimitada y leve de la mayoría de los casos, se recomienda no realizar exploraciones complementarias de momento, y valorar observación vs inicio de tratamiento tópico con cloruro de aluminio, según la limitación en la vida diaria de la paciente.
Se explica a la paciente, quien decide actitud expectante y control en 3-4 meses.
Evolución
En la visita posterior explica la resolución completa del cuadro.La queratodermia acuagénica es una rara afección caracterizada por la aparición súbita tras la exposición al agua de pápulas o placas blanquecino-translúcidas con aspecto macerado, normalmente en palmas de las manos. Puede ser asintomática o presentar síntomas como hiperhidrosis, tirantez, quemazón, dolor, parestesias o prurito. Lo más común es la autolimitación de las lesiones, por lo que si la afectación es leve y no hay limitación en la vida diaria, se recomienda actitud expectante.