Congreso de Residentes, JMF, Tutores y Unidades Docentes de la semFYC
21 y 22 de abril de 2023
Enfoque individual
Acude a urgencias un varón de 21 años sin RAMC ni antecedentes médicos conocidos con distonía cervical izquierda de 12 horas de evolución. Refiere inicio del cuadro de forma espontánea con afectación de musculatura orolingual, cervical lateral izquierda y de MSD, con resolución posterior de este último. A la anamnesis menciona estar en tratamiento puntual con pregabalina por gonalgia neuropática y haber iniciado metoclopramida 10 mg/8h por cuadro de náuseas y malestar general en las 24-48 horas previas. A la exploración se encuentra estable hemodinámicamente con contractura cervical de musculatura lateral cervical izquierda y posición antiálgica hacia la derecha. No rigidez muscular ni articular, no presenta acatisia. Exploración neurológica sin signos de focalidad. Se realiza analítica que descarta alteraciones iónicas ni elevación de reactantes de fase aguda.Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Ante cuadro compatible con síndrome extrapiramidal secundario al uso de metoclopramida.Tratamiento y planes de actuación
Se administra Biperideno 2 g vo.Evolución
Con resolución de la distonía y del dolor en los 30 minutos siguientes, muestra un episodio puntual de malestar y TA 93/57 por lo que se administra 1l SSF con control sintomático adecuado y es dado de alta tras un periodo de observación.El síndrome extrapiramidal secundario a inhibidores dopaminérgicos constituye una de las reacciones adversas de mayor repercusión clínica pudiendo incluso producir compromiso respiratorio por afectación de la musculatura laríngea. El manejo de la distonía secundaria se basa en el uso de antihistamínicos o anticolinérgicos como la diphenhydramina o el biperideno, pudiendo emplear Lorazepam ante refractariedad. La prescripción de metoclopramida y otros derivados es habitual en la practica clínica del médico de familia, conocer sus efectos adversos y el manejo terapéutico inmediato adaptándose a los fármacos disponibles tanto en el centro de salud como en el servicio de urgencias hospitalarias es necesario; pues aunque la evidencia científica suele apoyar el uso de diphengydramina o benztropio diversos artículos han demostrado la eficacia de biperideno o benzodiacepinas, más accesibles en nuestro sistema sanitario.