Comunicaciones: Casos clínicos

«Doctora, no puedo tragar» (Póster)

Ámbito del caso

El ámbito es en el Servicio de Urgencias.

Motivos de consulta

Varón de 25 años que acude a Urgencias porque tras deglutir jamón en la cena, ha notado cómo se “quedaba parado” en el esófago. No es la primera vez, en otras ocasiones ha tomado sorbos de agua y se resolví, pero en esta han pasado 5 horas. Ha bebido agua en pequeña cantidad pero siempre vomita. Los vómitos son claros, “como saliva”. Tampoco le es posible deglutir la saliva, aporta una bolsa de plástico.

Historia clínica

Enfoque individual

No alergias medicamentosas conocidas (NAMC).  No fumador y bebe ocasionalmente.  Antecedentes personales: no ha tenido enfermedades a destacar, excepto, “ciertos problemas con el estómago que se encuentran en estudio”.  Intervenciones quirúrgicas: apendicitis cuando tenía 9 años.  Sin tratamiento habitual. 

Enfoque familiar y comunitario

Es un chico joven de 25 años que vive con sus padres en un pueblo pequeño de la Sierra Norte de Málaga. Es estudiante Universitario.

Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas

La principal sospecha clínica fue una impactación de cuerpo extraño, pero nos planteamos los siguientes diagnósticos diferenciales: Cuerpo extraño impactado Esofagitis infecciosa Esofagitis eosinofílica Esofagitis medicamentosa  Espasmos difusos esofágicos Acalasia Anillo esofágico inferior  Estenosis esofágica benigna

Tratamiento y planes de actuación

El paciente pasó a observación: Medidas generales: dieta absoluta, canalización de vía venosa periférica e infusión de Glucosalino 2500 ml/día.  Tratamiento médico: Glucagón 1 mg intravenoso (iv) y Diazepam 1/2 iv.  Tras el tratamiento, el paciente comenzó a tolerar su propia saliva y tras esto, agua.  Se procede al alta del paciente tras comprobar la deglución tanto a líquidos como a sólidos.  En el informe de alta, se le da cita preferente para el Servicio de Digestivo, y se deriva a su Médico de Atención Primaria para control.

Evolución

El paciente fue estudiado por Digestivo. Le hicieron una endoscopia digestiva alta, en la cual tomaron biopsia. En la anatomía patológica se vio que el Diagnóstico definitivo fue Esofagitis eosinofílica y se le pautó tratamiento.

Conclusiones (y aplicabilidad para la Medicina de Familia)

La prevalencia de Esofagitis Eosinifílica ha aumentado exponencialmente en Europa y Norteamérica, con una incidencia entre 1-20/100.000 habitantes/año, y prevalencia de 13-49/100.000, según estudios publicados en 2018. El retraso en su diagnóstico y tratamiento supone un factor de riesgo para la remodelación fibrosa esofágica y la formación de estenosis.

Comunicaciones y ponencias semFYC: 2024; Comunicaciones: Casos clínicos. ISSN: 2339-9333

Autores

Martín Romero, Dolores
CS Antequera Estación. Antequera. Málaga
Garrido Montenegro, Gracia María
CS de Archidona. Málaga