XXXVII Congreso de la semFYC – Madrid
del 4 al 6 de mayo 2017
Atención Primaria
Caso multidisciplinar
Aparición de lesiones en palmas de ambas manos de días de evolución.
Enfoque individual
Varón de 52 años, no RAMC, fumador de 70 cigarrillos día (IPA 72), esquizofrenia paranoide diagnosticada a los 18 años en tratamiento, HTA, dislipemia mixta, obesidad, EPOC severo, apnea obstructiva del sueño (portador de CPAP), Cor pulmonale, glucemia basal alterada.
Acude a la consulta de AP por lesiones pustulosas, pruriginosas y descamativas en las palmas de ambas manos de dias de evolución. Hace 5 años presentó un episodio similar autolimitado.
En la exploración física se observan placas eritematodescamativas en ambas manos de distribución simétrica con pústulas amarillentas que confluyen parcialmente en la periferia. No lesiones en plantas ni en el resto del cuerpo.
Analítica: serología sifilis y VIH negativas, glucosa 124, ac. úrico 8,1, triglicéridos 173, resto normal.
Enfoque familiar
Vive con su madre viuda. Regular control sintomático y fases de regular cumplimiento terapéutico.
Desarrollo
Pustulosis palmar.
Diagnóstico diferencial: psoriasis, eccena dishidrótico, lues secundaria, dermatofitosis, acrodermatitis continua de Hallopeau
Tratamiento
Se inicia tratamiento tópico con esteroides y se deriva a dermatología para reevaluación.
Evolución
Satisfactoria con el tratamiento aplicado con mejoría de la sintomatología.
La pustulosis palmoplantar es una condición crónica inflamatoria poco frecuente de etiología desconocida y de controvertida relación con la psoriasis. Para algunos autores se trata de una variante de la psoriasis pero, para otros, de una entidad independiente. Relacionada con respuesta inmunitaria. Se caracteriza por la aparición de pústulas estériles en palmas de las manos y/o plantas de los pies con lesiones descamativas. Puede repetirse en el tiempo o puede recidivar y en ocasiones asocia eritema, prurito o parestesias. Es más frecuente en mujeres de 30-40 años. Se asocia a factores ambientales como el tabaco o estrés y a enfermedades del tiroides, diabetes, enfermedad celiaca, infecciones locales (dentales, sinusitis, amigdalitis) o empleo de fármacos como TNF que pueden contribuir a la aparición o exacerbación de los síntomas.
Es importante conocer esta patología benigna poco frecuente, cuyo diagnóstico es fundamentalmente clínico y que puede acudir a nuestra consulta de AP, para garantizar un diagnóstico y tratamiento oportunos.