13-14-15 de noviembre de 2025
Atención Primaria.
Se trata de una mujer de 49 años que acude a consulta por cuadro de edemas bimaleolares de dos semanas de evolución, que se acompaña de disnea de grandes esfuerzos. Desde hace unas 48 horas, aumento del perímetro abdominal. Discreta disminución del ritmo diurético. No dolor torácico. No fiebre, no sintomatología infecciosa. No ortopnea. No otra sintomatología acompañante.
Enfoque individual
Fumadora, IPA: 33. No otros antecedentes de interés.
Exploración: Normotensa, afebril. Saturación basal en consulta 95%. FR: 18 Auscultación cardiopumonar normal. Abdomen blando, mínimamente distendido. No doloroso. No datos de irritación peritoneal. Miembros inferiores: edemas con fóvea hasta raíz de miembros.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Dentro de nuestra sospecha inicial barajamos la opción de patología renal o patología cardíaca como principal hipótesis, por lo que desde el centro de salud solicitamos analítica para el día siguiente y posterior reevaluación tras inicio de furosemida oral.
Tratamiento y planes de actuación
En la analítica solo destacaba BNP 220, resto normal. Clínicamente a la reevaluación, la paciente se encontraba peor, con disnea de reposo y aumento de edemas, por lo que decidimos derivar a urgencias.
Evolución
En urgencias se le realizó angio TAC, para descartar tromboembolismo pulmonar. Hallándose datos sugestivos de hipertensión pulmonar moderada, por lo que ingresó en neumología para ampliar el estudio.
Debemos destacar la importancia de una adecuada anamnesis y exploración, así como tener la habilidad de discernir qué casos precisan de una atención más urgente. Nuestra paciente tuvo empeoramiento abrupto en unas 24 horas, lo que nos alarmó en cuanto a la necesidad de una valoración de urgencia.