XXXIX Congreso de la semFYC - Málaga
del 9 al 11 de mayo de 2019
Atención Primaria
Caso multidisciplinar
Cefalea, Catarro vías altas, Inestabilidad de la marcha.
Enfoque individual
Paciente mujer de 40 años fumadora de aproximadamente 1 caja al día, sin antecedentes de interés que acude por cuadro de inestabilidad de la marcha y sensación de giro de objetos, de aproximadamente 24 horas de evolución con alteración de la sensibilidad de 10 meses de evolución que comenzó en mano miembro superior derecho y ha progresado.
A la exploración en nuestra consulta Romberg positivo con lateralización a la derecha y marcha alterada con base de sustentación ampliada, por lo que se decide la derivación al S. Urgencias. Resto sin alteraciones.
Se realiza a su llegada a dicho servicio analítica básica con hemograma, bioquímica y coagulación en rango y un TC cráneo donde se visualiza imagen sugestiva de meningioma en ala esfenoidal derecha y lesiones múltiples en sustancia blanca que debido a la edad de la paciente se considera necesario la realización de RMN para descartar enfermedad desmielinizante, la cual se confirma posteriormente.
Enfoque familiar y comunitario
La paciente vive con su marido y su hija de 12 años. Además, como apoyos externos tiene a su hermano menor y a su suegra, que es su mayor apoyo. No relación con padre y madre fallecida hace 5 años.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
MENINGIOMA ALA ESFENOIDAL DERECHA
ESCLEROSIS MÚLTIPLE RECURRENTE REMITENTE.
D/D: Enfermedades inflamatorias (Behcet, poliarteritis nodosa…), infecciones (Lyme, neurosífilis…), sarcoidosis, Wegener, Adenoleucodistrofia, déficit vitamina B12, malformación Arnold-Chiari, malformación vascular
Tratamiento y planes de actuación
Radioterapia para Meningioma.
Dimetilfumarato para la EM, actualmente Fingolimod por intolerancia digestiva.
Evolución
Desde el diagnóstico la paciente ha tenido un solo brote que como resultado a dejado una mayor inestabilidad de la marcha, lo que le produce una mayor retracción social.
Se trata de una paciente que previamente sana ha sido diagnóstica a la vez de una enfermedad progresiva y un tumor cerebral benigno con miedo al futuro. Nosotros como médicos de familia en este caso debemos estar atentos a la posible aparición de nuevos brotes para su consecuente derivación y tratamiento, trabajar junto al S. Neurología y ayudar a la paciente a mejorar las estrategias de afrontamiento de la enfermedad, incluyendo si es posible, a la familia de la misma como apoyo.