XXXVIII Congreso de la semFYC – Barcelona
del 10 al 12 de mayo de 2018
Atención primaria y especializada.
Caso multidisciplinar
Dolor abdominal.
Enfoque individual
AP: Diabetes Mellitus tipo 2, de reciente diagnóstico, en tratamiento con metformina. Dislipemia mixta. Hiperplasia prostática benigna.
Anamnesis: Hombre de 81 años que consulta por dolor abdominal contínuo en mesogastrio, de tres semanas de evolución, que empeora con la ingesta, acompañado de distensión abdominal, sin náuseas ni vómitos ni alteración del ritmo deposicional. Se acompaña de anorexia y pérdida de 3 kg. de peso en el último mes. Destaca diagnóstico de diabetes mellitus tipo 2 un mes y medio antes.
EF: abdomen blando y depresible, doloroso a la palpación en mesogastrio y hemiabdomen inferior, no masas ni megalias, no signos de irritación peritoneal, no signos de ascitis. Resto anódino.
PC: se solicitó analítica general y tomografía axial computarizada abdominal preferentes. En analítica destacaba gamma glutamil transpeptidasa y amilasas altas. La prueba de imagen informó de masa centrada en región de cuello pancreático con comportamiento infiltrativo loco-regional sospechosa de lesión neoformativa primaria.
Enfoque familiar
Vive con su esposa, sin deterioro cognitivo.
Desarrollo
Desarrollo: Ante el resultado de la tomografia se derivó a hospital de referencia donde se realizó biopsia de páncreas con diagnóstico de adenocarcinoma infiltrante de cuello de páncreas, se realiza estadiaje de la lesión T4N0M0, siendo un tumor localmente avanzado e irresecable.
Tratamiento
Dado el estado general conservado del paciente se inicia quimioterapia paliativa con gemcitabina.
Evolución
Actualmente el paciente ha finalizado segundo ciclo de quimioterapia con buena respuesta y tolerancia, pendiente de realizar radioterapia.
La diabetes mellitus está relacionada con el cáncer de páncreas. Este tipo de tumor es de difícil diagnóstico en fases iniciales, es muy agresivo, suele ser asintomático y cuando se diagnostica normalmente está ya bastante avanzado.
En este caso la aparición de una diabetes mellitus previa, en un paciente de edad avanzada, sin antecedentes familiares de diabetes ni sobrepeso hay que considerarlo como una señal de alerta y no demorar las pruebas complementarias ante la más mínima sospecha clínica de patologia tumoral.