Congreso de Residentes, JMF, Tutores y Unidades Docentes de la semFYC
21 y 22 de abril de 2023
Urgencia en centro de Atención Primaria.
Motivos de consulta
Dolor torácico.
Historia clínica
Enfoque individual
Hombre de 69 años con FRCV exfumador, HTA y obesidad. Acude al Centro de Salud por clínica de dolor centrotorácico súbito opresivo de 30 ' (pico de intensidad máxima de 5') de duración mientras deambulaba en vía pública. No irradiado. Con disnea y palpitaciones. EVA 7/10.
En la toma de constantes destaca Sat.O2 93% aire ambiente, TA 70/50 mmHg y FC 118 lpm. En la exploración física destacan pulsos distales débiles.
ECG realizado: RS a 75 lpm, eje de 60º, sin signos de isquemia.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
El diagnóstico diferencial establecido comprendía las siguientes entidades: aneurisma aórticos toracoabdominales no disecado, insuficiencia aórtica sin disección, pericarditis aguda, tumor mediastínico, isquemia e infarto agudo de miocardio.
Tratamiento y planes de actuación
Ante la inestablidad hemodinámica se colocaron gafas nasales para aporte de O2, se canalizaron 2 vías periféricas y se administró carga de suero fisiológico endovenoso.
Se derivó en ambulancia medicalizada a centro hospitalario de referencia donde realizaron TC torácica que mostró imagen compatible con disección aórtica tipo A de Stanford con rotura de aorta contenida e IAo severa.
Evolución
Se tuvo que realizar una intervención quirúrgica de urgencia.
La disección aórtica aguda tiene una altísima mortalidad y su diagnóstico no puede demorarse.
Para ello es necesaria una orientación diagnóstica rápida basada en una historia clínica y exploración física adecuadas, ya que el acceso a pruebas complementarias es limitado en AP.
La sospecha clínica de esta entidad siempre debe estar presente ante un dolor torácico agudo aunque el ECG sea normal.
El dolor torácico agudo es un motivo de consulta muy frecuente. Cobra vital importancia diferenciar cuando se trata de enfermedad grave o de un proceso banal.
Es esencial la estabilización inicial del paciente en el medio extrahospitalario siguiendo el ABCDE (como se hizo en este caso) y la detección de que necesita una derivación urgente.
También se puede llevar a cabo control de la TA y FC con fármacos así como del dolor.
Cabe destacar la importancia del médico de familia ya que las primeras medidas de actuación pueden resultar cruciales.