III Jornadas de Ecografía de la semFYC - Granada
24 y 25 de septiembre de 2021
Enfoque individual
Mujer de 29 años con antecedentes de síndrome de ovario poliquístico, menstruaciones irregulares y endometriosis, acude a urgencias de su centro de salud por dolor abdominal intenso y náuseas coincidiendo con sangrado vaginal que la paciente achacaba a la menstruación( fecha de última regla hacía 2 meses). En la exploración física el abdomen estaba distendido, duro, muy doloroso a la palpación superficial y con gran defensa abdominal que impedía la palpación profunda, por lo que se decidió realizar ecografía abdominal en consulta de urgencias.Hallazgos ecográficos
En la ecografía abdominal se apreciaba una masa pélvica de unos 4,5 cm sin definirse con claridad si dependía de útero u ovarios. Ante dichos hallazgos se derivó a la paciente a urgencias hospitalarias para valoración por parte de ginecología. En dicho servicio se realizó un test de embarazo con resultado positivo y una ecografía transvaginal en la que se visualizaba un útero en anteversión con imagen intracavitaria compatible con endometrio decidualizado con saco gestacional de 31x41mm, además de engrosamiento placentario e imagen heterogénea e hipoecoica en posible relación con “imagen en copos de nieve”, compatible con tejido trofoblástico proliferado.Pruebas complementarias
Se realizó legrado aspirativo y anatomía patológica del mismo.Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Diagnóstico anatomopatológico: enfermedad trofoblástica/ mola hidatiforme parcial. Diagnóstico diferencial: mola hidatiforme, placenta aberrante, endometrioma.Tratamiento y planes de actuación
Tras el legrado aspirativo y el diagnóstico histológico, se realizó seguimiento de la paciente con controles semanales de hormona gonadotrofina coriónica humana (BHCG), radiografía de tórax y tomografía computarizada craneal.Evolución
Pasadas dos semanas la paciente se encontraba asintomática aunque afectada emocionalmente por el diagnóstico inesperado. Tras las seis primeras semanas, los títulos de BHCG fueron negativos en tres ocasiones seguidas y las pruebas de imagen fueron normales, por lo que fue citada en un mes para continuar con los controles hormonales mensuales establecidos según el protocolo de manejo de la mola hidatiforme.