XLIV Congreso de la semFYC - Barcelona
14-16 de noviembre de 2024
Enfoque individual
No recuerda antecedente traumático, aunque realiza ejercicio físico habitualmente. Había realizado 4 sesiones de fisioterapia (electroterapia, cinesiterapia, terapia manual) y tomado antinflamatorios sin mejoría. No valoración médica previa ni pruebas de imagen.
En la exploración física no identificamos deformidad ni edema ni signos flogóticos, aumento de laxitud de rótula en sentido craneal, respecto a la contralateral, con dolor a la movilización. Cajón anterior/posterior y maniobras meniscales negativas. Dolor en escala EVA de 4/10 y limitación en los últimos grados de flexión y extensión. Balance muscular 4+/5 en escala Daniels.
Radiología muestra pinzamiento del compartimento fémoro-patelar y signos óseos degenerativos incipientes, sin alteración en rodilla contralateral. Se descarta dismetría de extremidades inferiores.
Ecografía muestra derrame articular que se extiende a compartimento suprapatel·lar, más evidente en estudio dinámico, sin alteración del resto de estructuras ni de rodilla contralateral.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Se realiza diagnóstico diferencial entre sinovitis, entesitis y condromalacia rotuliana.
Tratamiento y planes de actuación
Se realizó infiltración ecoguiada de corticoides y anestésico en consulta de Atención Primaria y fisioterapia, también con el soporte de la ecografía, con buena evolución y control del dolor.
Evolución
Posteriormente se realizó Resonancia Magnética (RM) que mostró condromalacia patel·lar grado II, con fisuraciones condrales parciales, y ya no se observaba el derrame articular.
Queremos destacar en este caso clínico la utilidad de la ecografía en el abordaje de lesiones osteomusculares en AP, por su accessibilidad, inocuidad, repetibilidad, posibilidad de realizar un estudio dinámico y bilateral y seguimiento en el tiempo, ahorrando así recursos y tiempo si la comparamos con otras pruebas más caras y específicas como la RM. Asimismo proponemos su uso médico para alcanzar un diagnóstico certero, a través de un abordaje ordenado y sistemático, ya desde el período de formación MIR y para los fisioterapeutas, con el fin de que al poder localizar y valorar con precisión las lesiones, el tratamiento que aplican, como en este caso, sea más eficaz.