XXXVII Congreso de la semFYC – Madrid
del 4 al 6 de mayo 2017
Estudiar a largo plazo la efectividad de las infiltraciones periarticulares (IP), ya que el seguimiento de muchos estudios es de corta duración.
Estudio prospectivo de cohorte, realizado en una Consulta de Infiltraciones en un Centro de Salud, incluyendo consecutivamente los 104 primeros pacientes con 2 años de seguimiento. Las IP se realizaron con un corticoide de depósito (acetónido triamcinolona) a intervalos de un mes y un máximo de 3. Las variables descriptivas fueron: edad, sexo, IP previas, número y localización de la IP y complicaciones de la misma. La respuesta se valoró con la Escala Visual Analógica (EVA) valorada en cada infiltración y a los 3, 6, 12, 18 y 24 meses. Se consideró éxito del tratamiento si durante el seguimiento la EVA disminuía ≥2 puntos, no se derivaba al traumatólogo, no se precisaba rehabilitación o nueva IP, comparando las proporciones a los 3 y 24 meses mediante la prueba de McNemar. Se excluyeron 4 pacientes en el seguimiento por éxitus (3) y delirio (1), todos antes de los 12 meses. Se solicitó el consentimiento a todos los pacientes.
Completaron el seguimiento 100 pacientes, con una edad media de 58,6 años (DE 14,5) y un 69% de mujeres. El 21% habían recibido alguna IP previa. Las patologías más frecuentes fueron: hombro doloroso 40%, fascitis plantar 24%, epicondilitis 12% y trocanteritis 10%. La media de IP por paciente fué 1,6 (DE 0,7). En dos casos aparecieron complicaciones menores (mancha hipocrómica). La proporción de pacientes con éxito fué: 3 meses 78%, 6 meses 70%, 12 meses 62%, 18 meses 57%, 24 meses 52%, con diferencias significativas (p<0,001) entre los 3 y los 24 meses.
Las IP son seguras y efectivas, aunque dicha efectividad disminuye a largo plazo. Son precisos estudios controlados de larga duración comparando con otras alternativas (rehabilitación, AINE).