Atención Primaria.

Final de la vida.

Enfoque individual

Llevo un año en este cupo y desde que llegué conocí a una paciente muy especial. Tenía 3 hijos que la querían y cuidaban. Un marido 10 años mayor, pero en mejores condiciones de salud. Una casa preciosa. Una cuidadora para ella sola. Y a sus 78 años  estaba en fase avanzada de Esclerosis Lateral Amniotrófica.

Enfoque familiar y comunitario

Sujeta a una máquina para respirar, otra para aspirar secreciones, una PEG para alimentarse... y sin poder mover más que ligeramente las manos, era la reina de la casa. 15 años de enfermedad habían hecho a sus hijos los mejores auxiliares, enfermeros, médicos o celadores que podía tener. 

Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas

Pero en su último año de lucha, ya sólo podía conversar con la mirada, con esos ojos que expresaban todo lo que quería decir. Pese a que, años atrás, en alguna conversación con el neumólogo había dejado caer que si existiese la eutanasia  a ella le gustaría morir, nunca hizo un Documento de Instrucciones Previas.  

Tratamiento y planes de actuación

Cuando la enfermera, en una de sus visitas, me comento que había empeorado, enfrenté este tema a sus hijos. 

Evolución

Pero llegado el momento parecía querer aferrarse a la vida y ellos tampoco estaban estaban preparados. Lo hablamos durante una semana hasta el día que me llamaron porque "la veían peor". Acudí al domicilio junto al equipo de Cuidados Paliativos. Nunca me había dado la impresión de que sufriera hasta aquel momento. Ni siquiera todo su equipamiento podía mejorar la disnea que tenia y que la llevaba a estar adormilada la mayor parte del día. A la pregunta de si quería dormirse y descansar asintió con los párpados. Acordamos sedar a la paciente dando tiempo a sus hijos a que pudieran volver y despedirse. Durante 6 días la acompañaron en esa travesía ya mucho más tranquila gracias a la bomba de infusión que pusieron las compañeras de paliativos.

Pese a la aprobación de La Ley Orgánica 3/2021, de regulación de la eutanasia, el Documento de Instruciones Previas sigue siendo una herramienta que deberíamos fomentar entre nuestros pacientes cuando aún se encuentran en plenas condiciones para asegurar su voluntad al final de la vida.