XXXVI Congreso de la semFYC – A Coruña
del 9 al 11 de junio 2016
Favorecer la accesibilidad. Disminuir las visitas presenciales. Promover el apoyo social entre participantes. Compartir información. Ayudar a generar actitudes positivas hacia el abandono del tabaco y prevenir recaídas.
En el año 2005 comenzamos un programa de deshabituación tabáquica grupal (10 sesiones presenciales). En Septiembre de 2014 introducimos las nuevas tecnologías mediante el uso del WhatsApp como una herramienta más del programa. Se crea un grupo, administrado por un usuario del programa, que se oferta como ayuda a todos los participan, y en el que se incluyen los terapeutas, constituyéndose al inicio de cada nuevo grupo y permanecerá activo como mínimo un año. Se establece un acuerdo de que su uso estará limitado al objetivo final de dejar de fumar. Se incluyen pautas y material de ayuda, se estimula la participación y exposición de la experiencia del proceso y en el que los terapeutas además de asesores actúan como dinamizadores.
Se han creado 9 grupos en este periodo. Se logró disminuir de 10 a solo 6 visitas presenciales. Aceptaron su inclusión el 80 % (Participaron activamente 52%). La valoración global fue buena y muy buena en el 100% de los participantes. Los aspectos que resaltan los usuarios: la inmediatez, compartir experiencias, sentirse apoyado, aprender del grupo y evitar recaídas. Las tasas de abstinencia fueron mayores en el grupo participante (49vs35%).
El WhatsApp es una herramienta que mejora la accesibilidad. Disminuye consultas presenciales. Bajo coste y fácil manejo. Estimula la autorresolución de problemas entre iguales. Mejora las tasas de abstinencia aunque son precisos estudios más amplios y a largo plazo.
Es una herramienta aplicable a la deshabituación tabáquica y a otros muchos programas en Atención PrimariA y que enriquece la relación asistencial.