XXXVII Congreso de la semFYC – Madrid
del 4 al 6 de mayo 2017
Atención Primaria y dermatologia
Caso multidisciplinar
Prurito y lesiones en cuero cabelludo
Enfoque individual
Antecentes personales: No AMC, HTA, DM tipo 2.
Anamnesis: Paciente varón de 79 años que acude a la consulta por presentar lesiones descamativas en cuero cabelludo, pruriginosas y que han aumentado de tamaño. No animales domésticos. Se orienta como tiña capítis y se inicia tratamiento con terbinafina vía oral. A los 15 días acude a control con leve mejoría de las placas del cuero cabelludo pero aparición de lesiones pruriginosas en axilas, ingles e interglúteo. Se realiza interconsulta virtual con dermatología que orienta como micosis y recomienda tratamiento tópico con antifúngicos. A las 2 semanas acude nuevamente con poca mejoría de las lesiones y es visitado por la dermatóloga que le pauta tratamiento con corticoides tópicos y realiza biopsia de una lesión. En el siguiente control presenta mejoría de todas las lesiones. El resultado de la biopsia informa que es psoriasis.
Exploración física: Presenta placas blanquecinas descamativas en cuero cabelludo de predominio retroauricular y occipital. Posteriormente, máculas eritematosas con bordes activos en zona interglutea, axilas e ingles.
Pruebas complementarias: Biopsia de una lesión
Enfoque familiar
Vive con su esposa y un hijo con buena relación familiar. Bajo nivel de estudios
Desarrollo
Diagnóstico diferencial: Micosis, psoriasis
Identificación de problemas: La evolución tórpida de las lesiones con el tratamiento tiene que hacernos dudar de nuestra orientación diagnóstica inicial, aunque el debut de las lesiones cutáneas no sea la típica
Tratamiento
Cuando se inició tratamiento con calcipotriol/betametasona y tacrolimus en los pliegues, empezó rápidamente la mejoría de todas las lesiones cutáneas.
Evolución
En la actualidad realiza seguimiento con dermatologia con buen control de las lesiones
Cuando la evolución de la patología después de instaurar el tratamiento correcto no es la esperada tenemos que abrir nuestro diagnóstico diferencial, ya que en ocasiones las enfermedades no tienen una presentación típica como la descrita en los libros.
Las nuevas tecnologías con las fotos y la comunicación con los otros especialistas facilita una valoración diagnóstica y un tratamiento más rápido.