XXXVI Congreso de la semFYC – A Coruña
del 9 al 11 de junio 2016
Atención Primaria, Traumatología.
Caso multidisciplinar.
Dolor de rodilla derecha.
Enfoque individual
Antecedentes personales: esguince de LLI 2 años antes
Anamnesis: Varón de 38 años que consulta por dolor en rodilla derecha de semanas de evolución. Comienzo insidioso y evolución gradual, hasta llegar a cojear.
Niega traumatismo ni esfuerzo físico previo.
No respuesta a antiinflamatorios no esteroideos a dosis habituales.
Exploración, dolor en interlinea medial con maniobras meniscales negativas. No hidrartros ni bostezo de ligamentos.
Pruebas complementarias: Rx sin hallazgos de interés. RMN: masa heterogenea con calcificaciones groseras en su interior, en hueco intercondíleo, de 22x26x10 mm, acompañada de sinovitis periférica. Se recomienda biopsia excisional.
Enfoque familiar
Varón, soltero, no hace deporte regularmente, trabaja de operario en fábrica de moldes de fibra y resinas, en bipedestación casi todo el tiempo.
Desarrollo
Enfermedad de Nora (diagnostico tras biopsia).
Diagnóstico Diferencial:
- Periostitis agresiva.
- Osteocondroma intraarticular.
- Lesión tipo NORA.
- Osteosarcoma de superficie.
Tratamiento
Con dicho diagnostico deferencial y la sugerencia de biopsia, se remite a Cirugía Ortopédica para valorar biopsia.
La biopsia confirma “proliferación osteocondromatosa parostal bizarra (Enfermedad de Nora).
Tras artroscopia (y biopsia) comienza rehabilitación en el Centro de Salud.
Evolución
Se aconseja controles regulares clínico-radiológicos ya que los hallazgos histológicos pueden ser similares en lesiones malignas bien diferenciadas (osteosarcoma parostal).
Actualmente realizando rehabilitación funcional de la rodilla, con buena evolución.
Las gonalgias, y en general artralgias, son un motivo frecuente de consulta en AP. La ausencia de signos evidentes de patología en la exploración física y en las radiografías no descarta la existencia de patología.
La ausencia de mejoría con tratamiento médico habitual nos debe hacer ponderar la necesidad de pruebas diagnósticas más sensibles (RMN) para descartar patologías potencialmente graves, pues aunque en este caso la biopsia posterior descartó malignidad, la exploración clínica y las radiografías iniciales no mostraban lesión alguna.