XXXVIII Congreso de la semFYC – Barcelona
del 10 al 12 de mayo de 2018
Atención Primaria y Atención Hospitalaria
Caso multidisciplinar
Prurito
Enfoque individual
-Antecedentes personales: artritis reumatoide, osteoporosis, EPOC, HTA, hernia de hiato. Quirúrgicos: apendicectomía, colecistectomía, prótesis de rodilla y cadera.
-Anamnesis: Mujer de 75 años que consulta por prurito generalizado intermitente, de meses de evolución, que no cede tras toma de cetirizina. Refiere dolores articulares crónicos por su enfermedad de base. Sin otra sintomatología.
Tratamiento actual: metotrexato, ácido fólico, ácido alendrónico, amlodipino, losartán/hidroclorotiazida, pregabalina, omeprazol, budesonida/formoterol, bromuro aclidinio, salbutamol a demanda.
-Exploración física: anodina. Buen estado general, no lesiones cutáneas.
-Pruebas complementarias: Analítica: eosinofília (2000/microl) de 10 años de evolución, atribuida previamente a atopia.
Enfoque familiar
Natural de Colombia, vive en España desde 1999. 4 viajes a su país desde entonces (último 2013).
Desarrollo
-Desarrollo: prurito generalizado en paciente en tratamiento con morfina por dolores articulares. Inicialmente se orienta como posible efecto secundario del opioide, pero no cede tras reducir la dosis de morfina y aumentar el antihistamínico. Dados los antecedentes de viajes a zonas endémicas y eosinofília de años de evolución no estudiada, se decide análisis de parásitos en heces. Se detectan moderadas larvas de strongyloides stercoralis en 3/3 muestras.
-Orientación diagnóstica: estrongiloidiasis en paciente con antecedente de viaje en zona endémica y en tratamiento inmunosupresor.
Tratamiento
Derivación hospitalaria a Unidad Infecciosas para iniciar tratamiento con ivermectina.
Evolución
Tras tratamiento desaparece la eosinofília y la serología para strongyloides y el análisis de heces se negativizan.
La estrongiloidiasis es una enfermedad endémica en los trópicos y subtrópicos con malas condiciones higiénico-sanitarias. La infección puede ser asintomática. El tratamiento consigue un 90% de curaciones pero en inmunodeprimidos la enfermedad puede ser mortal.
Las enfermedades infecciosas son prevalentes en Atención Primaria. Si bien las más frecuentes no suelen ser graves, la detección de síntomas, alteraciones en pruebas complementarias, antecedentes de viajes, etc. deben alertarnos de la posibilidad de enfermedades que requieren un diagnóstico precoz y tratamiento específico.
En este caso, aunque el diagnóstico se realizó en Atención Primaria, se requirió de la Unidad hospitalaria de Infecciosas para el tratamiento. Una buena coordinación entre Atención Primaria y Hospitalaria es clave para un buen abordaje de muchas patologías graves.