XXXVIII Congreso de la semFYC – Barcelona
del 10 al 12 de mayo de 2018
mixto; Atención Primaria y Traumatología
Caso multidisciplinar
Verruga en borde de uña
Enfoque individual
Antecedentes personales: No alergias medicamentosas conocidas, No factores de riesgo cardiovascular. Osteoporosis en tratamiento con denosumab, neuralgia del trigémino en tratamiento con pragabalina. Linfoma gástrico hace unos 20 años. Colecistectomizada.
Anamnesis: Mujer de 68 años que acude por lesión hiperquerotósica a nivel subungueal de 1º dedo de mano izquierda desde hace dos meses motivo por le cual se le derivó a Dermatología para completar estudio. En las últimas dos semanas se acompaña de dolor y calor local. No recuerda cuerpo extraño ni traumatismo. En la exploración física presenta hiperemia y calor local junto con lesión hiperqueratósica con necrosis central y mínima fluctuación, dolor sin limitación para movimientos del pulgar. Se pauta tratamiento antibiótico con amoxicilina/ácido clavulánico ante sospecha de verruga con signos de sobreinfección y se le cita al finalizar tratamiento. Tras esto hay mejoría de los signos inflamatorios pero importante aumento del dolor y persistencia de la lesión. Solicitamos radiografía de dedo para descartar cuerpo extraño/afectación ósea y se aprecia en la misma osteolisis en sacabocados de dicha falange distal, con esto remitimos a Traumatología para valoración.
Enfoque familiar
jubilada. Muy buena red de apoyo familiar. Vive con su marido.
Desarrollo
Juicio clínico: Carcinoma epidermoide infiltrante bien diferenciado
Diagnóstico diferencial: verruga, panadizo, cuerpo extraño, osteomielitis, granuloma piógeno, queratoacantoma.
Tratamiento
se le realizó exéresis de falange distal.
Evolución
muy buena evolución clínica tras cirugía, con buena movilidad para la pinza manual. En seguimiento actual por Dermatología.
El carcinoma epidermoide suele aparecer en áreas de hiperquertosis y crecer hasta formar nódulos con ulceración, se produce en áreas fotoexpuestas, suele aparecer en mayores de 60 años y con frecuencia afecta el 1º dedo. La localización subungueal hace que se confunda con otras lesiones benignas como son las verrugas, granuloma piógeno, fibromas, quistes mixoides, nevus de la matriz. Por tanto, en toda lesión sangrante o pigmentada que no responder a tratamiento conservador debemos realizar el diagnóstico diferencial con lesiones tumorales.