XLIV Congreso de la semFYC - Barcelona
14-16 de noviembre de 2024
Atención Primaria
Hombre de 24 años que acude por mareo e hipostesia de hemilengua derecha.
Enfoque individual
Antecedentes personales: Sin antecedentes patológicos a destacar. Trabaja de ingeniero de telecomunicaciones, practica deporte habitualmente.
El paciente presenta sensación de inestabilidad cefálica e hipostesia de hemilengua derecha y mitad derecha de los labios por lo que acudió a urgencias, donde realizan exploración física sin otras alteraciones que la hipostesia, TC cerebral y analítica sin alteraciones.
En consulta de atención primaria presenta sintomatología y exploración similares por lo que se solicita RM cerebral. Reconsulta a los 4 días por empeoramiento de síntomas, asociando visión borrosa intermitente y semiología compatible con parálisis facial, por lo que se deriva de nuevo a urgencias donde se valora por neurología, oftalmología y otorrinolaringología. Con orientación de parálisis facial periférica se inicia tratamiento con corticoides con leve mejoría e indicando control evolutivo.
En los 2 meses posteriores, el paciente presenta múltiples consultas a urgencias y Atención Primaria por empeoramiento de la sintomatología, por lo que se reclama la RM solicitada previamente.
Enfoque familiar y comunitario
Padre con psoriasis, madre diagnosticada de fibromialgia e hipotiroidismo.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Ante una clínica neurológica progresiva y con escasa respuesta a los tratamientos administrados, se reclama la RMN, que se informa como sospechosa de esclerosis múltiple y se deriva a neurología.
Tratamiento y planes de actuación
Se deriva al paciente a la Unidad de Esclerosis Múltiple.
Evolución
Actualmente el paciente está en seguimiento por la Unidad de Esclerosis Múltiple.
Existe una amplia variabilidad sintomática en muchos de los trastornos neurológicos menos habituales en la práctica clínica habitual de los centros de Atención Primaria, y esto, a menudo nos puede dificultar llegar a una correcta orientación diagnóstica una vez descartado el accidente vascular cerebral, considerado como principal trastorno neurológico urgente.
En nuestra opinión, esto debe hacernos plantear el papel fundamental del médico de Atención Primaria en la labor diagnóstica de pacientes ya previamente valorados por otros especialistas, siendo la falta de mejoría clínica y las múltiples consultas al respecto signos de alarma.