VI Jornadas semFYC de Medicina Rural
28 y 29 de octubre de 2022
Actualización a fecha de septiembre de 2022 de la evidencia científica respecto al tratamiento con suplementación de vitamina D como método de prevención primaria en la práctica clínica diaria.
¿A qué pacientes de nuestro cupo está justificada la realización de un control analítico de los niveles de 25-hidroxivitamina D o 25(OH)D?
¿Cuáles son los niveles analíticos óptimos recomendados?
¿Existe evidencia en la reducción del riesgo de fracturas con el tratamiento suplementario de vitamina D3 en adultos sanos?
*Adultos sanos según el estudio referenciado: hombres y mujeres mayores de edad (estudio con edad media de 67,1 años) que sean pacientes sin déficit vitamina D, una baja densidad mineral ósea o haber sufrido una fractura previa.
En la población general sin patología relacionada con el metabolismo de la vitamina D no se aconseja la determinación de niveles séricos de 25(OH)D.
No existe consenso científico sobre los niveles exactos de referencia analíticos. Existe una aceptación generalizada sobre los niveles defendidos por la National Academy of Medicine de EEUU que afirma:
El suplemento con vitamina D3 no reduce de forma significativa el riesgo de fracturas vs un placebo en adultos sanos* según las evidencias del estudio referenciado.
Comenzar una búsqueda activa y crítica con nuestro proceder terapéutico hasta la fecha, con el objetivo de conseguir una desescalada de desprescripción acorde a la evidencia científica actualizada. Esta evidencia, no respetada, disminuirá la polimedicación de nuestros pacientes y ayudará mantener la sostenibilidad económica de nuestro sistema público sanitario.