XL Congreso Nacional y I Congreso Virtual de la semFYC - Valencia
del 15 de septiembre al 6 de octubre de 2020
ATENCIÓN PRIMARIA.
La familia solicita valoración por deterioro funcional de 4 días de evolución con somnolencia y debilidad asociada, imposibilitando al fisioterapeuta realizar los ejercicios habituales.
Coincide inicio de la clínica con la introducción de dos comprimidos de furosemida por edemas en extremidades inferiores. No otra sintomatología concomitante.
Exploración física: Destacan cifras tensionales bajas, cierta palidez cutánea, crepitantes finos en base izquierda y edemas bimaleolares, resto anodino.
Enfoque individual
Hombre de 81 años, sin alergias medicamentosas conocidas, exfumador de 58 paquetes/año. Ex-enolismo moderado.
Dependiente para las actividades básicas vida diaria. Convive con esposa e hija. Realiza marcha intradomiciliaria.
Antecedentes patológicos: hipertensión arterial, diabetes mellitus tipo 2, deterioro cognitivo mixto (metabólico-vascular), polineuropatía axonal sensitivo motora (tóxico-metabólica), bronquitis crónica, síndrome depresivo, hiperplasia benigna próstata.
Tratamiento habitual: amlodipino, lorazepam, quetiapina, mirtazapina, sertralina, carbidopa/levodopa, tamsulosina, omeprazol, enalapril/hidroclorotiazida, ácido acetilsalicílico, insulina retardada.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Toxicidad farmacológica/ Deterioro cognitivo/ Alteración metabólica/Alteración infecciosa.
Tratamiento y planes de actuación
Se orienta como hipotensión en contexto de polimedicación hipotensora. Se retira amlodipino y se solicita analítica general.
Evolución
En siguiente visita persiste hipotensión. Analíticamente destaca anemia normocítica normocrómica de probable origen multifactorial, colesterol total muy bajo, leve hipopotasemia en probable contexto de diuréticos y deterioro función renal probablemente secundario a toxicidad farmacológica. Se revisa medicación crónica, retirándose la hidroclorotiazida y disminuyéndose la quetiapina con la intención de retirar la dosis matutina. Se añade hierro oral. Ante la sospecha de desnutrición se solicita nueva analítica con determinación albúmina.
En posterior control se constata una ferritina normal, mejoría función renal y destaca hipoproteinemia con hipoalbuminemia pautándose suplementos proteicos, retirándose ferroterapia y reduciéndose la quetiapina.
El paciente mejora clínicamente.
Sigue control por Neurología que avala la disminución progresiva de quetiapina y la supresión del lorazepam intentando priorizar tratamientos alternativos como la melatonina o incluso la quetiapina de rescate para el sueño nocturno.
De momento se mantiene el tratamiento con carbidopa/levodopa hasta ver la evolución con la retirada de fármacos. En caso no mejoría de la inestabilidad y la marcha se plantearía nueva neuroimagen (previas sin alteraciones).
En pacientes pluripatológicos y polimedicados, ante nuevo problema de salud y descartada alteración metabólica o infecciosa subyacente, hay que plantearse la posibilidad de toxicidad medicamentosa como desencadenante del deterioro funcional.