-  Conocer la aplicabilidad de la retinografía en el medio rural y los beneficios obtenidos de su utilización para la comunidad. 

-  Coordinar un trabajo multidisciplinar entre el servicio hospitalario de oftalmología del hospital de referencia del área y los médicos de familia de atención primaria, principalmente en áreas alejadas de un núcleo urbano.

Tras la introducción de la retinografía en atención primaria, y el aumento de estudios que demostraban su aplicabilidad en este contexto, se propuso iniciar un programa de formación para su introducción en áreas rurales. La formación fue coordinada por médicos de familia y comunitaria de esta área rural y el servicio de oftalmología del hospital comarcal de referencia. Consistió en el aprendizaje básico del retinógrafo, la informatización en el dominio específico de registro de imágenes obtenidas, la formalización de un canal de comunicación directo con Oftalmología y el proceso de derivación. Desde entonces en los consultorios de esta área rural se realiza el cribado de retinopatía diabética y el seguimiento estrecho de signos de retinopatía hipertensiva en pacientes con patología crónica.

La introducción del retinógrafo en los consultorios rurales del área ha permitido realizar el seguimiento de pacientes con patología crónica (DM e HTA) desde una perspectiva longitudinal y facilitando la accesibilidad.  Se han producido menos derivaciones, evitando los desplazamientos de la población que habita el medio rural, la cual cuenta con mayores barreras para los desplazamientos al hospital de referencia. La percepción de la población es satisfactoria y aumenta la confianza en su médico de cabecera.

El desarrollo de las nuevas tecnologías, la dotación de medios al medio rural, y la integración del procesamiento de imágenes en los sistemas de informatización de la historia clínica, hace accesible esta prueba y la convierte en aplicable a amplios grupos poblacionales, incluidas las comunidades rurales.