XXXVIII Congreso de la semFYC – Barcelona
del 10 al 12 de mayo de 2018
La gota es la artropatía inflamatoria más frecuente. La mayoría de gotosos son controlados en atención primaria (AP). Se ha demostrado que la hiperuricemia protege de la enfermedad de Parkinson (EP), pero esta relación no está clara en la gota. Por un lado estos enfermos presentan los efectos antioxidantes del ácido úrico soluble y por otro los efectos proinflamatorios del depósito de cristales de urato monosódico.
Estudiar la relación ente gota y EP en una población urbana mediterránea.
Estudio casos-controles utilizando una base de datos electrónica anónima de AP de más de un millón de personas. . Fueron incluidas Todas las personas mayores de 40a con diagnóstico de EP o tratadas con fármacos específicos Se seleccionaron de forma aleatoria 4 controles pareados por edad y género. De todos ellos se recogieron los factores de riesgo gota, diabetes mellitus, hipertensión, hipercolesterolemia o tabaquismo) previos al diagnóstico de EP.
Para valorar la asociación entre EP y gota se utilizó un modelo de regresión logística ajustado por la presencia de factores de riesgo.
Se encontraron 21789 personas con diagnóstico de EP y se seleccionaron 87156 controles. La media de edad fue 75,5 años(DE 10,9). El 55,6% fueron mujeres.
Del total de la población de la base de datos(>40 años), un 0,67% de mujeres y un 0,7% de hombres tenían EP, y un 0,7% de mujeres y un 4,5% de hombres tenía gota.
La Odds Ratio ajustada de riesgo de padecer EP en gotosos fue de 0,552(0,504-0,606). En mujeres, un 0,9% con EP había presentado gota, por un 1,5% de las controles (OR 0,59). En hombres, un 4,5% con EP había presentado gota por un 9% de controles (OR 0,47).
La gota es una enfermedad muy prevalente, sobre todo en hombres de edad avanzada. Padecer gota, al igual que hiperuricemia, protege de la EP.