Congreso de Residentes, JMF, Tutores y Unidades Docentes de la semFYC
21 y 22 de abril de 2023
Explicar de una forma sencilla y visual las recomendaciones que se dan para aquellos pacientes que hayan sufrido un traumatismo craneoencefálico leve, de forma que se les pueda entregar la infografía y puedan conservarla.
Descripción
El traumatismo craneoencefálico leve es un motivo frecuente de consulta, especialmente en servicios de Urgencias. A pesar de que no suele conllevar más problemas que el propio traumatismo, en ocasiones pueden aparecer complicaciones y consecuencias posteriores que pasan desapercibidas por falta de vigilancia o adecuado tratamiento. Es por ello que las 24-48 horas posteriores al trauma son vitales para prevenir mayores problemas. Se recomienda a los pacientes:
- Permanecer acompañados en todo momento para vigilar la aparición de posibles síntomas.
- Evitar estímulos intensos como la luz y los ruidos, manteniendo reposo relativo.
- Evitar las comidas copiosas y las bebidas alcohólicas y/o estimulantes.
- Aplicar frío sobre el área dolorida.
- Vigilar la aparición de red flags por las que consultar en el servicio de Urgencias: pérdida de conocimiento, somnolencia y/o mareo progresivo, vómitos de repetición, dolor intenso de cabeza que no cede con analgesia, sangrado a través de nariz u oídos, cambios de carácter o alteraciones en el habla, pérdida de fuerza de extremidades y convulsiones.
La vigilancia inmediatamente posterior a un TCE leve es vital para prevenir y tratar adecuadamente complicaciones mayores, por lo que es necesario que los pacientes sean capaces de entender la información y estar alerta.
Como médicos, debemos advertir a los pacientes de los posibles signos de alarma tras un TCE leve; sin embargo, ya sea por falta de tiempo tras la consulta o de atención por parte del paciente, estas recomendaciones pueden pasar desapercibidas. Con esta infografía, se ofrece una visión rápida y esquemática de las recomendaciones, así como aquellas “red flags” por las que regresar a Urgencias.