XL Congreso Nacional y I Congreso Virtual de la semFYC - Valencia
del 15 de septiembre al 6 de octubre de 2020
Atención Primaria.
Motivos de consulta
Distensión abdominal y edemas maleolares.
Mujer de 54 años sin antecedentes de interés.
Hipertransaminasemia progresiva asintomática, distensión abdominal y discretos edemas maleolares ocasionales recurrentes. Exploración: Molestias epigàstricas difusas. Ecografía abdominal: hemangioma. Gastroscopia: Gastritis aguda, Helicobacter pylori posteriormente erradicado sin mejoría clínica. Ginecología valoró simultáneamente hemorragia postmenopáusica por miomas uterinos. RMN pélvica: Moderado líquido libre intraabdominal. Analítica: ANA 1/160 patrón citoplasmático tipo M2. Orientada como hepatopatía crónica no filiada, se deriva a hepatología. Se realiza TC abdominal: Signos de hepatopatía crónica con descompensación ascítica y hemangioma. PAAF líquido ascítico. Biopsia hepática: Necrosis centrolobular focal y marcada congestión, compatibles con hipoperfusión hepática, posiblemente por congestión venosa o fallo cardíaco. Durante el estudio aparece lesión cutánea biopsiada que muestra vasculitis linfocitaria inespecífica.
Ante la sospecha de insuficiencia cardiaca derecha se revalora con cardiología. Exploración: Chasquido protodiastólico, ingurgitación yugular con signo de Kussmaul y edemas, hipofonesis basal derecha y hepatomegalia. Electrocardiograma: Ritmo sinusal a 72lpm con voltajes bajos y alteración difusa de la repolarización. Ecocardiografía y RM cardiaca: Marcado engrosamiento pericárdico con adherencia de capas y derrame pleural derecho.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Pericarditis constrictiva idiopática. Insuficiencia cardiaca derecha secundaria. Hepatopatía crónica congestiva secundaria. Ascitis secundaria.
La pericarditis constrictiva es difícil de diagnosticar, infrecuente y con síntomas muy inespecíficos. En el diagnóstico diferencial deben considerarse síndromes ascítico-edematosos, cirrosis hepática (hepatitis virales, alcohólica, autoinmunes), patología cardiaca (insuficiencia cardiaca, taponamiento pericárdico), obstrucción del retorno venoso (síndrome Budd-Chiari, enfermedad venooclusiva), trastornos metabólicos (Wilson, hemocromatosis), entre otros.
Ante la sospecha de pericarditis constrictiva de etiología no filiada, se propone pericardiotomía quirúrgica y previamente se realiza coronariografía en la que no se aprecian lesiones.
Evolución
Pendiente de intervención.
La importancia de prestar atención a los síntomas inespecíficos y a la evolución de los mismos, nos ayuda a llegar a un diagnóstico correcto.