VII Jornadas semFYC de Medicina Rural
27 y 28 de octubre
Enfoque individual
Antecedentes personales: hipertensión arterial. Diabetes mellitus tipo 2, dislipemia. Deterioro cognitivo leve. Hipotiroidismo. Tratamientos: perindopril, indapamida, levotiroxina, metformina, empaglifozina, rabeprazol, pravastatina y fenofibrato.
Anamnesis: paciente de 78 años, acude a consulta acompañada de su familia por desorientación desde hace 2-3 días, con comportamientos erráticos (tomar más medicación de la habitual). Refieren que desde hacía dos días la paciente se quejaba de sensación nauseosa. Durante esos días objetivaron en el domicilio menos medicación de la que debería tener.
Exploración: tensión arterial 182/63 mmHg. Glasgow 15. Auscultacion cardipulmonar normal. Abdomen: normal. Exploración neurológica: normal.
Pruebas complementarias
Analítica: HEMOGRAMA normal. COAGULACIÓN normal. SODIO 140,0 mmol/L, POTASIO 1,9 mmol/L, MAGNESIO 1,51 mg/dl, UREA 32,0 mg/dL, CREATININA 0,74 mg/dL, BICARBONATO 36,9 mM/L , pCO2 49.4 mmHg, pH 7.485, TSH 0,35 UI/ml, corticotropina a.m 40,3 μUI/mL. Cortisol libre en orina 134 μg/24 h.
Electrocardiograma (ECG): ritmo sinusal a 66 lpm. PR prolongado. Onda T aplanada y onda U prominente.
Tomografia computerizada (TAC) toraco abdominal: Nódulo en glándula adrenal izquierda sólido sugestivo de adenoma funcionante.
Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas
Nos encontramos ante un caso de hipokalemia grave acompañada de alcalosis metabólica. El primer diagnóstico planteado fue una hipopotasemia secundaria a un aumento del tratamiento diurético con indapamida.
El siguiente diagnóstico valorado sería un hiperaldosteronismo primario por un nódulo suprarrenal funcionante, más probable en este caso por la gravedad de la hipopotasemiay la alcalosis metabólica
Y como última opción podríamos pensar en una tubulopatía proximal.
Tratamiento y planes de actuación
La paciente fue derivada a urgencias hospitalarias donde ingresó en el servicio de Medicina Interna. Se trató con terapia intravenosa y oral de potasio y magnesio.
Evolución
La paciente evolucionó favorablemente, presentando solamente náuseas sin vómitos y leve desorientación temporo-espacial. No presentó eventos arrítmicos y hubo una normalización de la magnesemia y la potasemia durante el ingreso.
La paciente había presentado hace años un episodio similar de desorientación e hipopotasemia leve tras inicio de tratamiento con hidroclorotiazida, que se diagnosticó y resolvió desde la consulta de Atención Primaria. Este antecedente conocido por su médico facilitó la orientación inicial del nuevo episodio, remarcando así la importancia de la atención individualizada y el conocimiento de los pacientes por su médico.