1º: Evaluar el impacto de Born To Learn (BTL) sobre el IMC de una población en edad preescolar, y compararlo con los valores de referencia.

2º: Identificar a los alumnos con una situación nutricional deficiente. 

Estudio descriptivo transversal unicéntrico. ONG BTL (Tanzania). 100 Menores entre los 3 y 6 años, que acuden a BTL de lunes a viernes para 3 comidas diarias.  Muestreo no probabilístico por conveniencia. Variables dependientes: IMC, IMC Z-score e IMC percentil. Variables independientes: edad, sexo, peso y talla.  Análisis estadístico: descriptivo uni y bivariante según naturaleza de variables.  Bajo tamaño muestral.  Conformidad de CI. 

49 niñas y 51 niños divididos en 4 clases.

3 años Niñas - IMC 14,33 (DE 1,65), Z-score -1,09 y p13,9. Niños - IMC 13,95 (DE 1,07), Z-score -1,88 y p3.

4 años Niñas - IMC 13,41 (DE 5,98), Z-score -2,58 y p0,5. Niños - IMC 13,90 (DE 1,56), Z-score -1,73 y p4,2.  

5 años Niñas - IMC 14,71 (DE 1,23), Z-score -0,33 y p37. Niños - IMC 14,78 (DE 0,85), Z-score -0,51 y p30,6.  

6 años Niñas - IMC 14,03 (DE 1,16), Z-score -1,00 y p15,9. Niños - IMC 14,33 (DE 2,74), Z-score -0,72 y p23,5.  

En nuestra población preescolar todos presentan un IMC < 18,5, lo que quiere decir que están delgados. Sin embargo, el único grupo poblacional desnutrido es el de las niñas de 4 años (14%), con un IMC Z-score -2,58.

El impacto positivo de BTL es visible en 2 aspectos. La diferencia de resultados con el Tanzania National Nutrition Survey 2018 (31,8% de los menores de 5años están desnutridos). Y el hecho, de que la única población desnutrida es la que no acudió previamente a BTL. En conclusión, las intervenciones sanitarias a nivel nutricional son fundamentales. Así podemos mejorar las condiciones de salubridad en la infancia, contribuyendo un mejor desarrollo del individuo y de la sociedad.

Autorización de la Comisión de Investigación (CI) del Hospital Universitario de Ceuta (HUCE).