Vómitos.

Enfoque individual

Antecedentes personales: hipertensión arterial y reflujo gastroesofágico. 

Anamnesis:

Mujer de 90 años que ha acudido en reiteradas ocasiones a la consulta de su médico de familia por síndrome constitucional de 3 meses de evolución asociado a vómitos de contenido alimenticio de predominio vespertino.

Nuestra paciente refirió pérdida de 20 kilos de peso en los últimos 3 meses asociado a saciedad precoz y vómitos de contenido alimenticio todos los días, produciéndose estos predominantemente por la tarde.

Exploración física:

Abdomen: blando, depresible, no se palpan masas ni megalias, sin dolor a la palpación, ni signos de irritación peritoneal. Murphy, Blumberg y Rovsing negativos.

Pruebas complementarias:

Análisis de sangre con marcadores tumorales, colonoscopia, gastroscopia y tomografía computerizada toraco-abdomino-pélvico. En dichas pruebas no se observó ninguna alteración.

Juicio clínico, diagnóstico diferencial, identificación de problemas

Dado que no se observó ninguna patología que explicase estos síntomas, decidimos volver a reinterrogar a la paciente preguntándole acerca de su vida familiar y fue cuando esta nos comunicó que el inicio de la pérdida de peso y los vómitos se produjo de manera simultánea a un problema familiar.

Dado el componente depresivo de la paciente se decidió iniciar tratamiento antidepresivo.

Tratamiento y planes de actuación

Inicio de tratamiento con inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina y volver a reevaluar a la paciente a las varias semanas y a los 2-3 meses para comprobar la eficacia del tratamiento antidepresivo.

Evolución

Tras varios meses del tratamiento con un inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina la paciente refirió mejoría de la sintomatología, refiriendo desaparición de los vómitos y mayor apetencia por la comida.

Es importante tener presente que en ocasiones problemas de ansiedad o depresión pueden manifestarse con síntomas físicos como los vómitos o cefaleas.

Por tanto, es importante conocer el ambiente psicosocial de nuestros pacientes para así poder dar una atención completa y en ciertos casos evitar pruebas complementarias innecesarias.

Es importante prestar atención al ámbito psicosocial de nuestros pacientes, ya que en muchos casos los problemas sociofamiliares pueden ser la causa de síntomas físicos y tratando estos problemas sociales mejoramos la calidad de vida de nuestros pacientes.