Determinar si la práctica clínica varía en función del horario de la visita en cuanto a peticiones de pruebas complementarias, derivaciones y nuevas prescripciones en global y según el perfil del profesional y del equipo.

Estudio transversal. Se incluyen médicos de familia (MF) (n=695) de 51 Equipos de Atención Primaria de un territorio urbano con visitas presenciales realizadas en agendas con ≥20 visitas, durante 2 meses. Se excluyen agendas de urgencias y domicilios.

Los datos proceden de la historia clínica y son anonimizados para su análisis.

Se comparan las pruebas complementarias solicitadas, derivaciones a especialistas y nuevas prescripciones de las visitas en cuartiles definidos según horario de visita, y en percentiles extremos: P10 y P90, mediante técnicas estadísticas bivariantes. Se estratifica según variables del profesional (tutor o no, sexo) y equipo (docente o no, nivel socioeconómico medido por índice Medea).

MF: 76% mujeres. 26.8% de centro docente. Media de visitas presenciales/día: 25.8.

Se analizan 397886 visitas: en 10.8% se solicitan peticiones de pruebas, sin observarse diferencias entre cuartiles (p=0.07), en 13.8% derivaciones (p=0.07), en 47.2% se realizan prescripciones (36.7% agudas), siendo un 0,5% superiores en el Q4 (p=0.01).

Se comparan 84310 visitas del P10 y P90: no hay diferencias entre percentiles excepto en la petición de pruebas complementarias, un 0,5% mayor en el P90 (p=0.04)

No se observan diferencias significativas estratificando según índice MEDEA, centro docente, ni tutores. Los MF hombres realizan un 1.3% más de peticiones de pruebas en P90 (p=0.003) y 1.4% más prescripciones totales y agudas en P90 (p=0.001), con relación al P10.

No se han encontrado diferencias relevantes en cuanto a la petición de pruebas, derivaciones y prescripciones según horario de las visitas. Sería necesario diseñar un estudio para medir directamente el cansancio del profesional y sus consecuencias en la praxis.